Ciudad de México, 23 nov (Prensa Latina) México aumentó sus reservas internacionales la semana pasada en 361 millones de dólares y acumula 205 mil 623 millones, la cifra más alta desde 1995 que le permitirá enfrentar un 2024 más complejo.
La buena noticia la dio hoy el Banco de México en su sitio web donde indica que, en lo que va del año, el nivel de los activos internacionales del país muestra un crecimiento de seis mil 529 millones de dólares, 3,3 por ciento.
Añade que el nivel actual de las reservas internacionales superó el anterior récord de 205 mil 559 millones de dólares registrado la semana del 3 de septiembre de 2021.
El ente emisor es el que ejecuta las inversiones en moneda extranjera y su principal característica es la alta liquidez; es decir, la facilidad de ser usadas para saldar rápidamente obligaciones de pago fuera de México.
Funcionan como un indicador de que una economía es capaz de cumplir con sus compromisos en moneda extranjera, lo que ofrece certidumbre a sus acreedores y ayuda a que el país tenga acceso a recursos en mejores condiciones.
Es lo que puede prevalecer en 2024, un año de elecciones generales, fin del mandato de Andrés Manuel López Obrador e inicio en septiembre del gobierno de quien salga electo o electa para presidir el país.
Esta última circunstancia es la que hace pensar a muchos economistas de diversos colores políticos y escuelas que, si bien el dinamismo económico de México sorprendió en 2023, la tónica no será la misma en 2024 cuando se vaticina una baja del PIB e incluso amagos de recesión ligera.
Pero son sólo pronósticos como el del especialista Jorge Marmolejo, manager de Franklin Templeton México.
Este experto alerta que la economía sufrirá una importante desaceleración en 2024, con un riesgo de presentar una ligera recesión, en un escenario medio, con 60 por ciento de probabilidad.
Pero también tiene 30 por ciento de probabilidad de que la economía tenga un aterrizaje suave (soft landing), gracias a su crecimiento de 3,5 por ciento este año, muy atractivo para los inversionistas.
Su pronóstico para 2024 es que habrá una desaceleración contenida y por tanto el crecimiento económico podría alcanzar 2,0 por ciento, mientras que la inflación se mantendrá baja y rondará el 4,0 por ciento, de ahí que la tasa de referencia del Banco Central podría ubicarse en 10 por ciento, bastante menor que el 11,25 de este año que ya termina.
Marmolejo no toma solamente el año electoral de México, sino de varios países, lo que podría tener implicaciones en el desempeño de los mercados.
Estos, explicó, «se estarían desarrollando en medio de pesimismo y hartazgo y ese descontento favorece a candidatos extremos. Por ejemplo, el fin de semana Javier Milei ganó las elecciones presidenciales en Argentina», alertó.