Dúbai, 1 dic (Prensa Latina) El éxito de la COP28 depende de un enfoque creíble en tres áreas: la reducción de emisiones y combustibles fósiles junto a la justicia climática, aseguró hoy el secretario general de la ONU, António Guterres.
Al intervenir durante la ceremonia de apertura de la Cumbre Mundial sobre Acción Climática (COP 28), el titular del organismo recordó que la humanidad cuenta con las tecnologías necesarias para evitar lo peor de la crisis «si actuamos ahora».
En el evento, incluido en el programa de la COP28 en Dúbai, el alto representante insistió en la necesidad del liderazgo para «curar» al planeta de la «enfermedad» provocada por el cambio climático.
«Los signos vitales de la Tierra están fallando: emisiones récords, incendios feroces, sequías mortales y el año más caluroso de todos los tiempos», advirtió.
Estamos a kilómetros de los objetivos del Acuerdo de París y a minutos de la medianoche para el límite de 1,5 grados, pero no es muy tarde, agregó.
A juicio del titular de la ONU, aún puede evitarse el choque y la quema del planeta gracias a las energías renovables y la acción climática.
El calentamiento global arruina los presupuestos, dispara los precios de los alimentos, altera la energía y alimenta la crisis del costo de vida, alertó al recordar además el impacto de los conflictos como el de Medio Oriente.
Para el éxito de la cita climática, el titular insistió en la necesidad de reducir drásticamente las emisiones, un cambio que deben liderar los miembros del G20, donde se concentran un 80 por ciento de estas.
«Insto a los países a acelerar sus cronogramas de emisiones netas cero, para acercarse lo más posible hasta 2040 en los países desarrollados y hasta 2050 en las economías emergentes», añadió.
Al mismo tiempo llamó a acelerar «una transición justa y equitativa hacia las energías renovables», con un uso tres veces mayor de estas y el doble de eficiencia energética.
El camino hacia la sostenibilidad climática también es el único camino viable hacia la sostenibilidad económica de las empresas de combustibles fósiles, enfatizó en ese sentido.
Guterres urgió a los gobiernos a ayudar a la industria a tomar la decisión correcta: regular, legislar, poner un precio justo al carbono, poner fin a los subsidios a los combustibles fósiles y adoptar un impuesto extraordinario sobre las ganancias.
Como último punto en su hoja de ruta, el diplomático portugués urgió a la justicia climática en un contexto donde los países en desarrollo resultan devastados por desastres que ellos no causaron.
Los costos de endeudamiento exorbitantes bloquean sus planes de acción climática mientras que el apoyo es poco y llega y demasiado tarde.
Los países desarrollados deben mostrar cómo duplicarán el financiamiento para la adaptación a 40 mil millones de dólares al año para 2025 -como prometieron- y aclarar cómo cumplirán los 100 mil millones – como se prometió, dijo.
Proteger nuestro clima es la mayor prueba de liderazgo del mundo, aseveró Guterres con un claro llamado a los líderes del planeta a dirigir el cambio.
Les insto a que lideren, el destino de la humanidad está en juego, remarcó.