Ámsterdam, 17 dic (Prensa Latina) El Rijksmuseum de Amsterdam exhibe hoy dos obras del genio de la pintura neerlandesa Rembrandt las cuales estuvieron perdidas durante dos siglos.
La institución, que atesora la mayor cantidad de piezas del pintor, sacó a la luz esta semana dos retratos adquiridos en una subasta por un coleccionista privado por valor de 14 millones de dólares.
Se trata de dos diminutas piezas de arte que durante 200 años permanecieron ocultas para el mundo y Rembrandt se las dedicó al matrimonio de ancianos Jan y Jaapgen van der Pluym, publicó la página del museo.
Los retratos ovalados miden 20 centímetros de alto y son especialmente significativos para esta galería, no sólo por su pequeño tamaño, sino porque estas personas pertenecían al círculo íntimo del artista y tenían un vínculo familiar con él.
Estas piezas de gran valor patrimonial son las más diminutas que se conocen del maestro neerlandés del siglo XVII, quien trascendió por sus obras de mayor tamaño encargadas por familias adineradas.
Los retratos fueron adquiridos en julio de este año por la familia Holterman en una puja de la casa Christieâ€Ös por más de 11 millones de libras y fueron cedidos al Rijksmuseum en préstamo a largo plazo.
Esta pinacoteca posee la más representativa colección de Rembrandt del mundo, declaró su propietario, Henry Holterman.
Con la utilización de rayos X, fotografía infrarroja y análisis de muestras de pintura, expertos del Rijksmuseum demostraron que los retratos fueron pintados por Rembrandt, según agregaron medios de prensa.
La archivera de la ciudad de Ámsterdam, Isabel van Eeghen, identificó en 1977 a los modelos de estas obras basándose en el catálogo de una subasta de 1760.
El hombre emparentado con Rembrandt era un rico fontanero de Leiden quien se casó en 1591 con Jaapgen Caerlsdr y desde entonces la obra permaneció en la familia hasta este año, lo cual le añadió pedigrí a las piezas, sostuvieron especialistas del museo.
Los retratos presentan, además, un estilo similar al de otras obras de Rembrandt de esa época, especialmente en la construcción de los rasgos faciales y la pincelada suelta, destacó la galería.
El depósito de los retratos al Museo Rijksmuseum no solo demuestra lo vivo que sigue el mecenazgo en los países del norte de Europa, sino la capacidad económica de estos mecenas, quienes pagaron hace menos de un año más de 11 millones de euros por la pareja.