Ciudad de Guatemala, 25 ene (Prensa Latina) La Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia de Guatemala explicó hoy sobre el hallazgo de «juguetes» en la oficina del mandatario del país, Bernardo Arévalo, referido por él la víspera.
En relación con las declaraciones del jefe de Estado en conferencia de prensa en la tarde del miércoles, la dependencia remarcó que se trató de la localización de dispositivos de audio y video, aunque sin aportar otros elementos.
«Comenzamos a hacer barridos electrónicos y en el despacho presidencial encontramos algunos juguetes, pero estamos analizando todas las instalaciones», contó Arévalo en respuesta a una pregunta.
Cabe decir que algunos eran viejos y otros son nuevos, aseveró en cuanto a si había efectuado alguna verificación de las instalaciones tras la toma de posesión.
Antes, la ministra de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, Jazmín de la Vega, denunció ante medios periodísticos que encontraron micrófonos en uno de los vehículos asignados para su trabajo y que empleó el extitular Javier Maldonado. Detalló que su personal ya revisó tanto su despacho como oficinas, pero a la fecha no hallaron otro tipo de dispositivos de vigilancia.
Puntualizó que tanto Arévalo como el ministro de Gobernación Francisco Jiménez estaban enterados de la situación.
Amplió que estarían procediendo a la inspección de otros vehículos que utilizan viceministros, personal de la cartera, y también a la acusación ante el Ministerio Público (MP).
Jiménez apuntó de inmediato que desde que se le notificó sobre el tema se iniciaron las acciones respectivas y añadió a las labores de Inteligencia Civil, inspecciones para establecer la presencia de dispositivos de video y audio en todos los ministerios.
Junto a la vicemandataria Karin Herrera, Arévalo llegó el pasado domingo 14 a la administración nacional por el período 2024-2028 centrado en el combate a la corrupción y con la promesa de una nueva primavera.
Ambos asumieron luego de un proceso electoral marcado por maniobras por parte del MP y a contrapelo de grupos de poder fuertemente enquistados en todas las estructuras de Guatemala.