Ciudad de Guatemala, 8 feb (Prensa Latina) Guatemala investiga como parte de las líneas seguidas hoy si el agua contaminada y la falta de saneamiento provocaron el brote de una enfermedad neurológica aguda cuyo aumento preocupa al país.
Los padecimientos gastrointestinales son el principal detonante de la afección, precisó la directora de Epidemiología y Gestión de Riesgo del Ministerio de Salud y Asistencia Social (Mspas), Lorena Gobern.
Hasta ahora, en 39 pruebas de laboratorio efectuadas a pacientes se encontró una serie de enteropatógenos «microorganismos» que pueden estar asociados con la enfermedad, apuntó la funcionaria.
De estas, 16 dieron positivo a la bacteria campylobacter, mientras que en el total de las muestras se detectó E. coli, subrayó durante una citación en el Congreso (unicameral) de la República.
Especialistas de Cuyotenango, Suchitepéquez, epicentro del fenómeno, enviaron al Laboratorio Nacional de Salud siete muestras de agua para su análisis físico-químico, con el objetivo de establecer la calidad de este recurso en ese lugar.
La cartera sanitaria informó además que vigilan los niveles de cloración del agua para que esté en los parámetros adecuados y así «evitar cualquier contaminación fecal que pueda adherirse al agua», remarcó.
El Mspas realiza, por otra parte, un muestreo en alimentos para vigilar la inocuidad de estos, mientras en actualización de la víspera elevó la cifra de casos registrados a 62 (19 hospitalizados) y cuatro fallecidos.
Gobern expresó que el saneamiento ambiental, la deposición de excretas, la calidad del agua y otras condiciones de salud en los municipios afectados, particularmente en Mazatenango, Suchitepéquez, son deficientes.
Consideró que posiblemente sea lo que desencadenó el incremento de enfermedades gastrointestinales, relacionadas con la presencia de campylobacter y E. coli.
El ministro de Agricultura del país, Maynor Estrada, descartó anomalías en las muestras de aves enviadas al Mspas.
El titular de Salud ûscar Cordón, describió, en cambio, que aún se maneja la teoría de que el brote de esta enfermedad neurológica proviene del contacto con el «tracto intestinal» de aves, «no solo pollos, palomas o chompipes».
El Mspas reiteró que la transmisión de esta afección no es directamente de persona a persona, sobre la base de la investigación científica recabada hasta el momento.
Esa cartera estableció a fines de la semana pasada la alerta epidemiológica y poblacional en Suchitepéquez, Escuintla; Coatepeque, Quetzaltenango y Retalhuleu, debido a la afección.
Entre los síntomas del padecimiento destacó, aparte de la diarrea y fiebre, problemas respiratorios y disminución de los reflejos de estiramiento.
«Aproximadamente dos semanas después inicia la debilidad muscular por las piernas y aumenta a todo el cuerpo», advirtieron expertos.