Ciudad de Guatemala, 20 feb (Prensa Latina) El Congreso (unicameral) de Guatemala definió hoy a los dos magistrados suplentes del Tribunal Supremo (TSE) que le ordenara la Corte Constitucional (CC) en vista del abandono del país de cuatro titulares.
El pleno con 148 votos a favor optó por Pablo Adolfo Leal para completar el período 2020-2026 en sustitución de Ervin Gabriel Gómez y decidió dejar en el cargo a Noé Adalberto Ventura, según informó el Organismo Legislativo.
En este último caso, al someter a sufragio la renuncia presentada en 2020, una mayoría de 114 diputados contra solo tres consideró razonable desestimarla y que este continuara en el cargo.
Mediante una resolución, la CC el pasado 23 de enero dio un plazo de 30 días al Congreso, al amparar provisionalmente a la abogada Karen Fischer, quien cuestionó las licencias a esos cuatro togados en el exterior, sin inmunidad y con órdenes de captura.
En el texto, el alto tribunal subrayó que las «circunstancias lo hacen aconsejable y porque se dan los supuestos que prevé el artículo 28 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad».
El Ministerio Público de esta nación centroamericana atribuyó a Irma Elizabeth Palencia, Ranulfo Rafael Rojas, Gabriel Vladimir Aguilera y Mynor Custodio Franco los delitos de fraude, incumplimiento de deberes y abuso de autoridad.
El Parlamento otorgó el 30 de noviembre pasado, con el retiro de inmunidad a esos cuatros magistrados, luz verde a la Fiscalía para investigarlos por la supuesta compra sobrevalorada del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares.
La decisión sobrevino después de analizar la recomendación realizada por una Comisión Pesquisadora por supuestas anomalías en la contratación del servicio informático de transmisión de resultados de los comicios de 2023.
Al término de la votación entonces, el diputado del partido Movimiento Semilla, Samuel Pérez, declaró que lo ocurrido pareciera un sentimiento de venganza personal de algunos legisladores, más bien la mayoría, que no fueron reelectos.
Estas acciones -agregó- no son nada nuevo para los miembros de mi agrupación, porque «sabemos que esta es una persecución política».
La presidenta del TSE de Guatemala, Blanca Alfaro, informó a fines de diciembre último que el permiso de tres de los cuatro magistrados caducó, pero luego explicó que se acogieron a vacaciones.
Esta semana, después de 80 días ausentes, trascendió que los cuatro promovieron acciones legales para tratar de detener el proceso en su contra.
El TSE de Guatemala estaba sin conocer temas de materia electoral que ameritaban la integración del pleno, en tanto se conformaba por cinco magistrados y suplentes solo había tres tres.