Ciudad de México, 25 feb (Prensa Latina) Citlalli Hernández, secretaria general del partido Morena, llamó hoy al pueblo mexicano a movilizarse para defender al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su proyecto político de la Cuarta Transformación (4T).
La dirigente denunció la campaña sucia y de terror que desde la derecha nacional y trasnacional se ha puesto en marcha para tratar de imponer en redes sociales la narrativa de un supuesto involucramiento del ejecutivo federal con el crimen organizado y afectar al mismo tiempo la candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum.
A su vez, el grupo parlamentario de Morena en el Senado, que coordina Ricardo Monreal, cerró filas con el mandatario y advirtió que sus integrantes permanecerán unidos y firmes en su defensa.
Citlalli Hernández alertó que esa guerra sucia en la que se utiliza a medios de aparente prestigio, le está costando millones de dólares a la derecha mexicana y trasnacional.
Es muy obvia «la campaña de terror, guerra sucia y calumnias que advertimos, inicia en estos tiempos frente a la inevitable continuidad de la transformación», resaltó la también senadora.
Alertó que los adversarios utilizan a los voceros de la derecha, pagados a sueldo y vendidos como periodistas, y usan a reporteros y directivos de medios de comunicación con aparente prestigio y los acompañan de una red de bots y trols impulsando tendencias.
Dijo que la mayoría del pueblo ya no les cree sus mentiras. No hay una sola prueba de lo que intentan acusar, porque es falso.
Además, añadió, la fortaleza de liderazgo del presidente Andrés Manuel López Obrador, entre otras cosas, es la autoridad moral. Es, sin dudarlo, el presidente más honesto de nuestra historia.
En tanto, los senadores de Morena condenaron enérgicamente la campaña sistemática de calumnias y desinformación, financiada por sectores conservadores y amplificada por algunos medios de comunicación en redes sociales, donde falsamente se le acusa de haber recibido financiamiento del narcotráfico.
Estos ataques, que no solo carecen de cualquier fundamento ético o prueba verificable, forman parte de la estrategia de quienes se oponen al cambio verdadero e intentan recuperar el poder que el pueblo les retiró, recurriendo a la calumnia y la infamia.