Washington, 23 mar (Prensa Latina) Estados Unidos condenó hoy el atentado terrorista la sala de conciertos Crocus City Hall, ubicada en la ciudad rusa de Krasnogorsk, en la provincia de Moscú, que dejó más de 130 muertos, incluidos menores de edad.
Extendemos nuestro más sentido pésame a quienes perdieron a sus seres queridos y a quienes resultaron heridos o afectados por estos ataques desmedidos contra civiles inocentes, expresó un breve comunicado de prensa de la Casa Blanca.
El texto calificó de «atroz» el atentado extremista ocurrido la víspera, cuando un grupo de hombres armados, vestidos con ropa de camuflaje, abrieron fuego en la sala de conciertos minutos antes de comenzar la actuación de una banda rusa de rock.
Al tiroteo lo siguió un incendio que afectó un área de casi 13 mil metros cuadrados, según el Ministerio de Emergencias del país euroasiático.
El comunicado de la secretaria de prensa de la mansión ejecutiva, Karine Jean-Pierre, subrayó que el Estado Islámico -que se atribuyó la autoría del ataque- «es un enemigo terrorista común que debe ser derrotado en todas partes».
Tras los hechos de ayer el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional John Kirby, expresó que las imágenes provenientes del lugar eran «simplemente horribles y duras de ver».
El funcionario anticipó que descartaba indicios de una participación de Ucrania en el ataque.
Las autoridades rusas detuvieron a 11 implicados en el atentado -todos ciudadanos extranjeros-, incluidos los cuatro pistoleros.
Los cuatro sospechosos fueron capturados en una carretera que enlaza Moscú con Briansk, a escasos cuatro kilómetros de la frontera con Ucrania, país al que pensaban evadirse y donde tenían contactos, advirtieron los servicios rusos.