París, 10 abr (Prensa Latina) El Paris Saint-Germain (PSG) recibirá hoy al Barcelona en el partido de ida de los cuartos de final de la Champions de fútbol un duelo de alta tensión dentro y fuera de la cancha.
El Parque de los Príncipes resultará en esta noche primaveral pequeño con sus casi 50 mil butacas para el decimotercer enfrentamiento entre los rojiazules liderados por su estrella saliente Kylian Mbappé y unos blaugranas que buscan recuperar la muchas veces saboreada gloria futbolística.
Los entendidos ponen al equipo local de favorito por su plantilla, en la que sobresalen además del goleador Mbappé, el arquero Gianluigi Donnarumma, los defensores Marquinhos y Lucas Hernández, los volantes Vitinha y Warren Zaire-Emery y el delantero exBarcelona Ousmane Dembélé.
Ayer, el entrenador del Barça, Xavi, apeló a ese pronóstico alegando ser sincero y no perseguir la estrategia de quitar presión a sus jugadores, mientras el técnico del PSG y otrora jefe del banquillo del club catalán, Luis Enrique, rechazó la condición de favorito y dijo preferir verse como la víctima.
Ambos elogiaron la calidad del rival y mencionaron que será un partido difícil.
El equipo visitante cuenta con futbolistas de sobra para vaticinar un interesante cruce, que tendrá la vuelta el 16 de abril en el Estadio Olímpico de Montjuic, pese a la ausencia de Gavi y las dudas sobre los recién incorporados Andreas Christensen, Pedri y Frenkie de Jong. Destacan en la nómina del Barcelona en el eje de ataque Robert Lewandowski, Lamine Yamal e Ilkay Gündogan, el guardameta Marc-André ter Stegen y los zagueros Jules Koundé y Ronald Araujo.
El PSG y el Barça se han medido 12 veces antes, con balance de cuatro triunfos por bando e idéntica cantidad de empates.
En el más reciente cruce, en la temporada 2020/2021 de la Liga de Campeones, el club rojiazul eliminó a los blaugranas, pero cuando se piensa en estos choques viene a la mente la histórica remontada del Barça de Lionel Messi en la campaña 2016-2017, cuando goleó 6-1 en casa después de caer 0-4 en la ida.
Fuera de la cancha también abundará la tensión, con una seguridad reforzada por la amenaza lanzada por el grupo terrorista Estado Islámico.
Anoche, el ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, anunció la protección extra, reconociendo la relevancia de la Liga de Campeones, aunque precisó que no se trata de un riesgo nuevo y que habrá que resguardar otros lugares, porque los terroristas pueden golpear en sitios donde no los esperan.