Washington, 21 abr (Prensa Latina) En busca hoy de «garantizar una gran victoria en noviembre», según dicen, el expresidente de Estados Unidos Donald Trump y el Partido Republicano anunciaron un nuevo programa para reclutar a 100 mil personas como trabajadores electorales.
Los voluntarios serán parte esencial del plan para tratar supuestamente de «salvaguardar la integridad del proceso electoral» el próximo 5 de noviembre.
En un comunicado de prensa citado en medios locales, el Comité Nacional Republicano y la campaña de Trump dijeron que desplegarán voluntarios y abogados en los estados en disputa para observar e informar de presuntas irregularidades durante la votación y el proceso de recuento de votos.
El Comité también lanzará esfuerzos de litigio «cada vez que los funcionarios electorales violen la ley», subrayó.
«Tener a las personas adecuadas para contar las papeletas es tan importante como convocar a los votantes el día de las elecciones», añadió Trump en el comunicado.
«ÂíLos republicanos ahora están trabajando juntos para proteger el voto y asegurar una gran victoria el 5 de noviembre!», enfatizó.
Los observadores electorales suelen ser nombrados por los partidos políticos para garantizar que el proceso se lleve a cabo de manera justa; pueden informar sus inquietudes a las autoridades y funcionarios de sus formaciones políticas, pero no se les permite interferir en el proceso electoral, expresó la Conferencia Nacional de Legisladores Estatales.
Sin embargo, algunos se preguntan qué quiere decir Trump, cuyos esfuerzos por subvertir los resultados de las elecciones de 2020 lo llevaron a él y a sus aliados a una montaña de problemas legales, con tener las «personas adecuadas» para contar los votos.
Después de todo, sus mentiras sobre la manipulación de las boletas en 2020 llevaron a que los trabajadores electorales fueran engañados e intimidados, y los trabajadores electorales han informado de una avalancha de amenazas violentas contra ellos en los años posteriores, señaló NBC News.
Incluso dos de los juicios que tiene pendientes el exmandatario están relacionados con ese empeño por aferrarse al pretender subvertir los resultados de las elecciones que perdió frente a Joe Biden.
El exgobernante sigue metido en el canal de la farsa electoral en 2020 casi a punto de los comicios de 2024 y ha utilizado la táctica infundir miedo sobre la seguridad de las elecciones de noviembre, apelando a un lenguaje apocalíptico para advertir sobre otra posible pérdida.
Trump y Biden se enfrentarán, presumiblemente, en la boleta electoral en menos de siete meses en lo que muchos califican como una pelea revancha.
En las encuestas nacionales ambos van casi empatados, pese a todos los problemas legales del republicano, quien por estos días enfrenta el primer juicio penal en la historia a un expresidente de Estados Unidos.