Quito, 22 abr (Prensa Latina) El ministro de Energía y Minas de Ecuador, Roberto Luque, anunció hoy que el Gobierno busca alternativas ante la crisis en ese sector que provocó extensos apagones en el país andino.
En una conferencia de prensa ofrecida este lunes, Luque reiteró que el déficit de energía aquí es de mil megavatios de potencia o el 22 por ciento de la demanda máxima de electricidad de todo el territorio nacional.
De acuerdo con el funcionario, frente a ese escenario analizan las ofertas de tres empresas para la contratación de barcazas, en un plazo de 20 días y detalló que buscan aprobar una regulación para la importación de gas natural, como fuente alterna de generación.
Luque insistió en las causas que han generado la crisis energética en esta nación sudamericana y entre ellas destacó la situación climática que «ha generado la peor sequía en los últimos 60 años», dijo.
Asimismo, aseguró que hay «años históricos de falta de inversión en generación y mantenimiento» y se refirió a decisiones tomadas en los últimos meses, las cuales -aseveró- causaron que cerca de 150 megavatios (MW) quedaran fuera de la red eléctrica nacional.
Los cortes de energía regresaron hoy a Ecuador en medio de una crisis en ese sector y luego de la consulta popular y referendo de este domingo.
Este lunes, el Municipio de Quito informó que los apagones, que se aplican a nivel nacional, también afectan el suministro de agua potable en barrios de esta capital.
También el director de la Cámara de Comercio de Guayaquil, Juan Carlos Díaz, alertó la pasada semana que los cortes de electricidad dejan pérdidas estimadas de 20,6 millones de dólares por hora al sector productivo.
En una entrevista a la emisora Radio Sucesos, Díaz señaló que no solo las empresas están sufriendo pérdidas, sino también las personas que dependen de su trabajo diario para llevar sustento a sus hogares.
Este viernes, tras varias jornadas de apagones, el presidente Daniel Noboa decretó un nuevo estado de excepción en todo el territorio nacional, medida que durará 60 días y permitirá la militarización de las centrales hidroeléctricas.
La disposición llegó en medio de denuncias, por parte del Gobierno, de un supuesto sabotaje en el sector eléctrico poco antes de la consulta popular y referendo de este domingo 21 de abril.
El secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, aseveró en una entrevista al canal local Teleamazonas que «abrieron las compuertas» del embalse Mazar, uno de los más grandes e importantes del país, pero expertos señalaron que técnicamente eso es imposible.