Avalan estrategia mundial 2025-2028 para proteger la salud

Ginebra, 30 may (Prensa Latina) La 77 Asamblea Mundial de la Salud (AMS) aprobó una estrategia sanitaria mundial 2025-2028 ascendente a 11 mil 100 millones de dólares para promover, proporcionar y proteger la salud de cara a un futuro difícil.


La iniciativa acordada por los participantes en la cita hace hincapié en el cambio climático, el envejecimiento, la migración, las amenazas pandémicas y la equidad, y está adaptada a una época de rápidos cambios geopolíticos, científicos y tecnológicos, precisa un comunicado oficial de la AMS.


La estrategia, el Decimocuarto Programa General de Trabajo, considera el periodo 2025-2028 como una oportunidad excepcional para construir sistemas sanitarios resilientes y preparados para el futuro y, tras la pandemia de la Covid-19 retomar el camino hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con la salud.


Para alcanzar esos propósitos se trazaron seis objetivos estratégicos que reflejan las principales áreas de interés para este cuatrienio.


En primer lugar, responder a la creciente amenaza para la salud que supone el cambio climático, abordar los factores determinantes de la salud y las causas profundas de la enfermedad en las políticas clave de todos los sectores, fomentar la atención primaria y la capacidad de los sistemas sanitarios esenciales para la cobertura sanitaria universal.


También se prevé mejorar la cobertura de los servicios sanitarios y la protección financiera para hacer frente a la inequidad y las desigualdades de género,  prevenir, mitigar y prepararse para los riesgos de todo tipo y detectar rápidamente y mantener la respuesta a las emergencias.


Este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó un estudio de viabilidad que expone su contribución a la salud mundial y solicita inversiones en su estrategia 2025-2028 para salvar 40 millones de vidas y mejorar la salud de seis mil millones de personas.


El argumento a favor de las inversiones sustenta la Ronda de Inversiones de la OMS, que se inició el domingo y ha recibido apoyo y compromisos de los países miembros para copatrocinarla e impulsarla para su culminación a finales de este año.


La 77 Asamblea Mundial de la Salud, en la que participan autoridades sanitarias de todo el planeta, debe concluir con acuerdos sobre las emergencias sanitarias, el acceso a herramientas transformadoras y la resistencia a los antimicrobianos.


Se trata del órgano decisorio supremo de la OMS y sus principales funciones son determinar las políticas de la organización, designar al director general, supervisar las políticas financieras y revisar y aprobar el proyecto de presupuesto por programas.