Madrid, 10 jun (Prensa Latina) Los barómetros prelectorales en España daban una clara victoria de la derecha en los comicios europeos, y hoy, en la hora de los análisis, salvo excepciones, el balance es agridulce.
La euforia de los conservadores del Partido Popular (PP) contrasta un poco con la realidad, porque si bien fue la organización española triunfadora al integrarse al nuevo Parlamento Europeo (PE), con 22 escaños, apenas sacó dos de ventaja a los socialistas del PSOE.
Aunque si hay un hecho incuestionable que llama a la reflexión en algunos casos, la mesura en otros y bastantes temores: el PP ganó por poco margen, pero la ultraderecha de Vox consiguió seis curules y otra organización extremista, Se acabó la fiesta, alcanzó tres.
España no llegó al punto de Francia y Alemania, donde se dio un avance de la ultraderecha que puso a temblar a los respectivos gobiernos. Sin embargo, la posibilidad de alianzas del PP, que ya las tiene con Vox, con Se acabó la fiesta, supone una amenaza.
«La polarización no ha debilitado a la ultraderecha. Antes tenía dos caras, ahora tres. A la combinación de Feijóo con Abascal se suma Alvise. No es una buena noticia para la sociedad española», admitió la candidata del PSOE y vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera.
Se refería así los líderes del PP, Alberto Núñez Feijóo, de Vox, Santiago Abascal y de la agrupación agitadora Se acabó la fiesta, Luis Alvise Pérez.
Empero, de otro lado Ribera señaló que «si el señor Feijóo ha planteado estas elecciones como un plebiscito contra el presidente del Gobierno (Pedro Sánchez), está claro que lo ha perdido»
De todos modos, el PP consiguió 22 escaños en el nuevo PE, aunque con cuatro puntos porcentuales (34,18) por encima de los socialistas del PSOE (30,19) y 20 curules.
El crecimiento más significativo, si bien esperado, se dio con Vox, que alcanzó el apoyo del 9,62 por ciento y seis escaños, superando al movimiento de izquierdas Sumar (4,65 por ciento y tres eurodiputados), uno más que Podemos, otra agrupación de izquierda, que logró el 3,27 por ciento de respaldo.
De igual forma, la extrema derecha como sexta fuerza política nacional, ahora en el PE, con Se acabó la fiesta, con 4,58 por ciento y obtuvo tres representantes en la Eurocámara.
Asimismo, ingresaron en el PE alianza Ahora Repúblicas (Esquerra Republicana Cataluña, EH Bildu del País Vasco y BNG de Galicia), Junts de Cataluña y la Coalición por una Europa Solidaria (CEUS) de PNV (País Vasco) y Coalición Canaria.
Fuera de la Eurocámara quedó el centroderechista Ciudadanos, un partido que lleva tres años en horas bajas y perdió sus ocho diputados, con apenas el 0,69 por ciento de los votos.
Desde las filas del PP se congratularon por el éxito y afirmaron que la izquierda sufrió «una derrota apabullante en Europa», unas declaraciones de su secretaria general, Cuca Gamarra, que parecieron hacer suyos también los avances de la ultraderecha.
El mayor aviso lo dio el propio Núñez Feijóo.
«Con estos resultados se abre un nuevo ciclo político en el país, ganaremos en las próximas elecciones generales», adelantó.
‘Nos han dedicado un triunfo electoral contundente, un triunfo electoral transparente y el triunfo que estábamos esperando’, exclamó Feijóo en un discurso ante sus simpatizantes en Madrid.
Fue la novena vez que España participó en los comicios para elegir un nuevo Parlamento Europeo (PE). A partir de que hizo oficial su ingreso a la Unión Europea el 1 de enero de 1986, fueron los socialistas del PSOE y los conservadores del PP, los máximos vencedores.
La próxima legislatura del PE arrancará en julio próximo y permanecerá hasta el mismo mes de 2029, con 720 eurodiputados de todos los países de la Unión Europea, incluidos 61 escaños para España.