Ciudad de Guatemala, 19 jun (Prensa Latina) El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (Mspas) de Guatemala emitió hoy una alerta epidemiológica preventiva debido a la temporada de intoxicación por consumo de hongos silvestres que aumentan con las lluvias.
Mediante un comunicado, la cartera sanitaria precisó que con la llegada de las precipitaciones proliferan estas especies en zonas boscosas y rurales, por lo que «son una opción popular en la cocina del país».
Sin embargo, acotó el organismo por medio de la Dirección de Epidemiología y Gestión de Riesgo, que algunos hongos silvestres contienen sustancias tóxicas que ponen en riesgo la salud. Sobre ello solicitó a todos los servicios de salud reforzar e intensificar acciones enfocadas en la vigilancia con equipos de respuesta inmediata.
Instó, por otra parte, a prevenir y preparar a los servicios de emergencia y laboratorios de la red hospitalaria por posibles casos de intoxicación por hongos silvestres.
Enfatizó en acondicionar insumos y reactivos para procesamiento de pruebas hepáticas y renales en aras de la atención inmediata, obtener una historia clínica completa, detalle del lugar de residencia y sitio de recolección del hongo silvestre.
Además, conseguir imágenes de las plantas consumidas, en donde sea posible para su identificación, así como llenado completo de la ficha epidemiológica.
Pidió advertir a todos los servicios de salud para que el personal haga el diagnóstico clínico oportuno y sensibilizar a la población sobre la importancia de identificar rápidamente una intoxicación por consumo de hongos.
La historia de Guatemala está marcada por brotes de intoxicación debido al consumo de hongos silvestres venenosos, mayormente por el género Amanita.
Las autoridades sanitarias advirtieron que en el 2023, entre mayo y septiembre, se registraron 22 casos de intoxicación en nueve niños y 13 adultos, de los cuales nueve perdieron la vida.
A nivel mundial, la nación destaca en el tercer puesto por utilizar esta vía de alimentación, a partir de las tradiciones locales, de acuerdo con datos oficiales.
Cálculos evidencian que cada año ocurren ocho mil casos de intoxicación debido al consumo de hongos silvestres, con un promedio de 10 víctimas fatales, de las cuales este territorio centroamericano registra la mitad.