Después de que la noche de ayer elementos de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua intentaran detener al exgobernador de dicha entidad, Javier Corral Jurado, en la Ciudad de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador, reaccionó en el marco de su conferencia mañanera.
En este sentido, el mandatario aseguró que el caso tiene fundamento en “diferencias políticas”, las cuales sólo buscan impedir que el político no llegue al Senado. Aunado a lo anterior, también refirió que sin previo aviso a la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, las autoridades de Chihuahua quisieron llevar a cabo dicha detención.
No había procedimiento de colaboración con la CDMX. Eso es lo que sucedió. Son asuntos de pleitos políticos y de venganza”, expresó.
En más sobre el tema, el jefe de Estado refirió que todo este tema se da porque la actual gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, y el exgobernador César Duarte tienen nexos en contra de Javier Corral.
Eso viene de tiempo atrás, esa alianza o contubernio y resulta de que la actual gobernadora de Chihuahua y el ex gobernador Duarte, están aliados en contra de Corral porque Corral fue el que promovió las acusaciones en contra de Duarte, que tuvo que irse a Estados Unidos, allá fue detenido, extraditado”, comentó.
Cabe mencionar que dicha detención no fue posible capitalizarla debido a que al no haber recibido la autorización de colaboración del encargado de despacho de la FGJ de la CDMX, Ulises Lara López, dicho operativo quedó suspendido evitando ejecutar la orden de aprehensión hacia el chihuahuense.