Bogotá, 30 ago (Prensa Latina) El Ministerio de Defensa de Colombia confirmó hoy la muerte de dos soldados debido a una agresión armada que la entidad atribuyó al Ejército de Liberación Nacional (ELN), en el norte del departamento de Santander.
«Este infame ataque del ELN evidencia su falta de compromiso con la paz y con el país. Las operaciones ofensivas siguen en marcha para llevar a los responsables ante la justicia», refirió en un mensaje en redes sociales la cartera ministerial.
La muerte de los soldados se divulgó dos días después de que las fuerzas militares del país aseguraran haber abatido a cuatro individuos que pertenecerían al frente Juan Fernando Porras de la mentada insurgencia, tras un operativo desarrollado en el norteño municipio Bucarasica.
Las hostilidades entre las partes crecen desde que expiró el pasado 3 de agosto el cese al fuego que durante un año estuvo vigente entre el Gobierno y la guerrilla.
Justo durante esta jornada la Delegación de Paz del Gobierno con el ELN insistió a ese grupo armado volver a las negociaciones, prorrogar a la mayor brevedad el acuerdo de no agresión, al tiempo que reafirmó su disposición para abordar los temas planteados en el contexto de las pláticas.
El pronunciamiento siguió a unas declaraciones del consejero comisionado de Paz, Otty Patiño, quien se mostró escéptico sobre la reanudación de las negociaciones y declaró que era al ELN al que correspondía dar muestras de voluntad para retomar las conversaciones.
Tras las afirmaciones de Patiño, el primer comandante del ELN, Antonio García, escribió en redes sociales que la negativa de la guerrilla a seguir en los diálogos se debe a que el Gobierno no ha querido cumplir con acuerdos hechos en la Mesa.
«En cualquier negociación la parte que acepta incumplimientos acepta imposiciones y por tanto claudica», alegó.
Uno de los más insistentes reclamos del ELN tiene que ver con la solicitud de esa guerrilla de que se expida un decreto para ser eliminados de la lista de los Grupos Armados Organizados, conocida como GAOS, a lo que Patiño ha respondido que eso implicaría la confección de una ley y que en el Congreso no hay un ambiente propicio para ello.