Santiago de Chile, 11 oct (Prensa Latina) El gobierno chileno presentó hoy el Plan de Prevención, Mitigación y Control de Incendios 2024-2025, que contempla incrementos en el presupuesto, las brigadas y aeronaves para enfrentar un flagelo que cada temporada golpea al país.
En este período el Ejecutivo destinará 156 mil millones de pesos (unos 168 millones de dólares) a diversas instituciones encargadas de las emergencias y desplegará 311 brigadas y 74 aeronaves a nivel nacional.
«Sabemos que se acerca la época de más calor y mayor riesgo. Nuestro clima en verano es inclemente y por eso es bueno prevenir», declaró en el lanzamiento del programa el presidente chileno, Gabriel Boric.
Señaló el mandatario que el escenario es complejo tanto a nivel internacional como regional, y citó como ejemplos los incendios de las últimas semanas en Brasil y Bolivia.
Boric recordó la catástrofe del pasado verano en Viña del Mar, Villa Alemana y Quilpué, que dejó 137 muertos y miles de damnificados, algo que no se debe volver a repetir y para eso -dijo- se están tomando medidas y fortaleciendo la coordinación interinstitucional.
Recordó que la gran mayoría de estos desastres son provocados por el ser humano, con o sin intención, y advirtió que los autores de estos delitos serán perseguidos y condenados.
En la presente temporada volverá a operar la aeronave modelo Air Tractor AT 802, con capacidad de tres mil litros de agua, y habrá mayor cantidad de retardantes y otros insumos para el combate a las llamas.
También se elevarán los estándares en la selección del personal para el manejo de fuego y serán más exhaustivos los test psicológicos para la contratación.
Esta medida se adopta después de descubrirse que los autores del siniestro pasado en la región de Valparaíso fueron un bombero voluntario y un miembro de la Corporación Nacional Forestal.
El plan de prevención y control prevé además el reforzamiento de tecnología para la detección temprana, lo cual incluye la instalación de cámaras y el uso de la inteligencia artificial para alertar sobre señales de humo o focos de incendios forestales.