Beirut, 11 oct (Prensa Latina) El primer ministro interino de Líbano, Najib Mikati, reiteró hoy la adhesión del país a la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU y el derecho a la defensa de la tierra.
Al finalizar una sesión del gobierno, Mikati anunció la presentación de una solicitud al Consejo de Seguridad para emitir una resolución de alto al fuego en Líbano, tras la hostilidad israelí.
En su discurso, el titular del Ejecutivo calificó de crimen la agresión del ejército de Israel contra la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil), desplegadas en el sur de la nación desde 1978.
La máxima autoridad del gabinete convocó a todos los funcionarios y fuerzas nacionales asumir juntos la responsabilidad de ser firmes, salvar y proteger la sociedad y el país.
El titular libanés indicó que unas 595 escuelas acogieron a desplazados en varias regiones y «estamos trabajando para preparar más centros de acogida».
«La guerra israelí contra Líbano continúa y se intensifica con asesinatos, matanzas, destrucción, violaciones aéreas de nuestra soberanía y ataques terrestres», puntualizó.
Respecto al apoyo internacional, agregó que aún no ha llegado al país asistencia en efectivo y «habrá total transparencia en cuanto al mecanismo para recibir y distribuir la ayuda».
En este punto, manifestó que a partir de mañana se pondrá en marcha un puente aéreo entre Arabia Saudita y Líbano para transportar asistencia humanitaria.
Mikati reclamó un alto al fuego y señaló que el ejército libanés debe demostrar su papel en la mejora de la seguridad en la frontera sur.
El primer ministro apuntó que la solución diplomática está sobre la mesa y la Resistencia de Líbano (Hizbulah) es un socio en el gobierno y está de acuerdo en implementar la Resolución 1701.
Hasta el momento, los bombardeos israelíes mataron a más de dos mil 100 ciudadanos, cifra superior a los mil 300 fallecidos durante la guerra de los 33 días en 2006.