Caracas, 21 oct (Prensa Latina) El secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Jorge Arreaza, valoró hoy que el ingreso de un Estado miembro a los Brics constituiría un aporte significativo.
«Sería una relación ganar-ganar», tanto para el mecanismo de integración latinoamericano y caribeño como para el bloque de países liderados por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, escribió en su cuenta de Telegram.
Subrayó que «nadie duda que en torno a los Brics se articula el nuevo y necesario mundo multipolar» y muchos son los países que aspiran incorporarse a este bloque de nuevo tipo.
Arreaza mencionó en su reflexión algunas de las características que hacen de la incorporación del ALBA-TCP «un gran aporte a la consolidación y desarrollo institucional» de ese foro, que mañana inicia en Kazán, Rusia, su XVI Cumbre con la participación de Estados miembros de la Alianza.
Destacó en primer lugar que el grupo de países latinoamericanos y caribeños surgió -hace ya casi 20 años- a partir de valores semejantes a los del gran bloque alternativo, como el respeto a la «soberanía, la solidaridad, la cooperación y la complementariedad económica».
El diplomático afirmó que el mecanismo de integración latinoamericano se constituyó en una alternativa real, tangible, que puso al ser humano en el centro de su dinámica y a la economía como una vía para garantizar los derechos sociales y la felicidad de los pueblos.
Ejemplificó, en ese sentido, con las políticas sociales del ALBA-TCP en materia de alfabetización, salud (Barrio Adentro, formación de médicos, Misión Milagro) y atención a proyectos concretos de impacto social.
Aludió además al surgimiento de Petrocaribe, alianza petrolera que «es y será la expresión más noble del ALBA y de la solidaridad del comandante Hugo Chávez (1954-2013), para hacer de la energía un instrumento de cooperación y desarrollo compartido y no de dominación y lucro».
También citó al Banco del ALBA como verdadero instrumento de desarrollo solidario, que permitió emprender proyectos sociales, productivos y de infraestructura, según las prioridades de cada país y sin condicionamientos, además del Sucre como moneda de intercambio entre sus países miembros.
Al respecto, consideró que esta moneda demostró que es posible construir mecanismos financieros propios, y reveló que hoy «está en revisión para su reactivación a la luz de los nuevos tiempos y tecnologías».
El secretario ejecutivo nombró a las Empresas Gran-nacionales como mecanismos de comercio justo y de procesos productivos conjuntos, complementarios y no competitivos; a la nueva Agencia de Cooperación y de la Zona Económica propia, que avanza esta última en su diseño innovador.
Arreaza afirmó que el ALBA-TCP pone a entera disposición de los Brics y las instituciones nacientes «para darle vida al nuevo mundo», las iniciativas de sus líderes fundadores, Fidel Castro (1926-2016) y Hugo Chávez, quienes pensaron en la felicidad y unidad de todos los pueblos.
Remarcó finalmente que la Alianza es una fuerza moral de resistencia y liberación, que demostró la capacidad infinita de unión para la vida, «con criterio humano, ético y antiimperialista, a pocas millas del propio imperio estadounidense».