Ciudad de México, 27 nov (Prensa Latina) Estados Unidos perdería unos 400 mil empleos y se reduciría su crecimiento de concretarse la subida de aranceles anunciada por el presidente electo de ese país, Donald Trump, según estimaciones divulgadas hoy por autoridades de México.
Al difundir tales datos con base en consultas a la industria automotriz y de autopartes, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, señaló que el primer impacto de ese impuesto será sobre las compañías estadounidenses General Motors, Stellantis y Ford Motor Company.
«Cuando dice el presidente Trump voy a ponerle a México 25 por ciento porque exporta demasiado a Estados Unidos, lo que está diciendo es vamos a ponerles un impuesto a las empresas norteamericanas más importantes del mundo, porque producen en México y exportan » hacia el país norteño, expuso.
De acuerdo con el titular, si hubiese, por parte de Canadá y México, que poner otros impuestos similares -que es lo esperado por muchos comentaristas-, también se afectaría a estas tres empresas, pues son las que más exportan a esta nación latinoamericana partes automotrices.
La medida de Trump «afecta primordialmente a este complejo industril y tecnológico cuyos principales exponentes son estos tres grandes grupos de los propios Estados Unidos. O sea, es un tiro en el pie», aseveró al intervenir en la habitual conferencia de prensa de la mandataria Claudia Sheinbaum.
Ebrard recordó que el 88 por ciento de las pick ups vendidas en la vecina nación norteña provienen de México y las tres principales marcas son las mencionadas, de modo que se estima un incremento en promedio de tres mil dólares por unidad, aproximadamente, en el mejor escenario.
«El impacto de esta medida principal es en contra del consumidor en Estados Unidos y de las tres más grandes empresas de la industria automotriz norteamericana», enfatizó.
De acuerdo con el funcionario, el comercio intrarregional entre los tres países de Norteamérica de enero a septiembre de este año ascendió a mil 776,5 billones de dólares, lo cual equivale a un tercio del Producto Interno Bruto mundial.
«En la mesa se encuentran dos alternativas: nos podemos fragmentar y dividir con acusaciones y tarifas -porque si nos ponen una tarifa, nosotros ponemos otra, y Canadá pone otra…- o construimos juntos una región fuerte, competitiva y preparada para liderar el futuro», expresó.
Su país, añadió, opta por la segunda variante y prepara una propuesta sobre la base de elementos como la estabilidad regional, la prosperidad compartida y la competitividad global.
«Debemos optimizar las cadenas regionales de suministro, mantener costos bajos, garantizar que nuestros productos lideren los mercados globales y trabajar en equipo, no dividirnos», subrayó Ebrard, al destacar el apoyo a esta propuesta en Estados Unidos y el mundo.
El secretario de Economía aludió, además, a la aceleración de las conversaciones con la Unión Europa para terminar la modernización del acuerdo con ese bloque, y de otros con países como Brasil.
En una carta dirigida a Trump, Sheinbaum consideró ayer que las amenazas y los aranceles no resolverán el fenómeno migratorio y el consumo de drogas en el vecino país, e indicó que «se requiere de cooperación y entendimiento recíproco a estos grandes desafíos».