Ginebra, 4 dic (Prensa Latina) Tensiones geopolíticas, ratios de deuda pública elevados y débiles perspectivas de crecimiento a mediano plazo caracterizarán el escenario mundial en 2025, juzgó hoy la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
De cara al próximo año, las perspectivas varían significativamente entre regiones, aunque el Producto Interno Bruto (PIB) global podría registrar una expansión del 3,3 por ciento, consideró el organismo compuesto por 38 Estados, la mayoría de ellos europeos, Estados Unidos, Canadá, México, Chile, Colombia y Costa Rica.
Dentro del ámbito de la OCDE, es de esperar que la inflación siga disminuyendo, del 5,4 por ciento en 2024 al 3,8 en 2025 y al tres por ciento en 2026, teniendo en cuenta la orientación todavía restrictiva de la política monetaria en buena parte de los países, indicó la entidad, con sede en París, Francia.
Los aumentos de los salarios nominales y la continua desinflación reforzaron los ingresos reales de los hogares de los Estados miembros; sin embargo, advirtió, el crecimiento del consumo privado sigue siendo moderado en la mayoría de los países, lo que refleja la débil confianza de los consumidores.
Según los cálculos de la OCDE, el PIB de Estados Unidos podría crecer un 2,8 por ciento en 2025, antes de ralentizarse hasta el 2,4 por ciento en 2026, mientras la evolución de la eurozona sería del 1,3 y 1,5 por ciento, respectivamente.
Las Perspectivas, juzgó la institución, ponen de relieve la persistencia de la incertidumbre: una intensificación de los conflictos en curso en Oriente Medio podría perturbar los mercados energéticos y golpear la confianza y el crecimiento; en tanto, el alza de las tensiones comerciales podría obstaculizar el crecimiento de las transacciones.
Las sorpresas adversas relacionadas con las proyecciones de crecimiento o la senda de desinflación podrían desencadenar correcciones perturbadoras en los mercados financieros, remarcó el pronóstico.
No obstante, ejemplificó, una pronta resolución de los principales conflictos geopolíticos también podría mejorar la confianza y reducir los precios de la energía.
Otro aspecto relevante en el contexto de la OCDE es la escasez de mano de obra, lo cual constituye un reto para las empresas de muchos países, y «el envejecimiento de la población no hará sino agravarlo», acotó el economista jefe de la institución, Álvaro Pereira.