Bogotá, 17 mar (Prensa Latina) La Federación Colombiana de Educadores (Fecode) rechazó hoy las acciones de amedrentamiento, intimidación y obstaculización del derecho a la protesta y la movilización sindical desde la administración del Distrito Capital a propósito de las marchas que ocurrirán mañana.
Mediante un comunicado, esa asociación también condenó las declaraciones de los alcaldes de Medellín, Bucaramanga, Cartagena y por la gobernación de Antioquia, quienes aseguraron que no permitirán el curso del día cívico en sus territorios, con lo cual según el gremio buscan limitar el ejercicio a los reclamos por las garantías laborales.
Durante la jornada de mañana se prevé la realización de marchas en todo el país a las que se sumarán indígenas, obreros y otros actores sociales para demandar el avance en el Senado de la reforma laboral impulsada por el Gobierno.
El presidente del país, Gustavo Petro, declaró como día cívico la jornada del martes para que la clase trabajadora pueda salir a protestar y reclamar sus derechos, en respuesta a la firma por ocho congresistas de la Comisión Séptima del Senado de una ponencia de archivo que constituye la antesala del hundimiento del proyecto de ley.
Según Fecode, resulta inadmisible que, bajo el argumento de garantizar la «normalidad académica» las secretarías de educación y gobiernos municipales ejerzan indebidas presiones a los rectores para que asuman funciones punitivas en su pretensión de condicionar y obstaculizar el legítimo ejercicio de la huelga y la protesta social.
«El llamado a reportar el presunto ausentismo no justificado de los docentes que participen en la jornada de movilización del 18 de marzo, invocando que prima el derecho de la niñez y de la juventud, no solo vulnera los derechos sindicales, sino que representa una amenaza directa a la libre expresión y organización de los trabajadores», refirió el documento.
Añadió que la movilización del magisterio es una respuesta legítima ante la desatención de demandas justas relacionadas con la financiación educativa, la salud del magisterio y las condiciones laborales del sector.
La Federación también exigió a la Secretaría de Educación del Distrito de Bogotá, Medellín, Cartagena, y demás entes territoriales certificados, que se abstengan de tomar cualquier tipo de represalia contra los docentes que participen en la movilización y que garantice plenamente el ejercicio de los derechos sindicales.
Pese a que Petro declaró la jornada de mañana como un día cívico, algunos mandatarios regionales como el de Bogotá, Carlos Fernando Galán; de Medellín, Federico Gutiérrez, y de Montería, Hugo Kerguelén, anunciaron que no apoyarán la convocatoria.
Ante esto, el jefe de Estado calificó a los funcionarios como «alcaldes del dinero queriendo amenazar al pueblo».
Colombia: Sindicato de educadores pide que se respete derecho de protesta
