El presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Romero Herrera, señaló que el Plan México presentado por el Gobierno Federal para enfrentar los nuevos aranceles impulsados por el presidente Donald Trump es un avance, pero resulta insuficiente para proteger de manera integral la economía nacional, especialmente a la industria automotriz, considerada estratégica para el país.
Romero Herrera destacó la necesidad de una respuesta unificada y contundente para defender los intereses nacionales y salvaguardar los empleos de miles de familias mexicanas. “Primero está México y debemos cuidarnos entre nosotros mismos”, afirmó el dirigente panista.
El líder del PAN propuso una serie de medidas para fortalecer la industria automotriz y mitigar el impacto económico de los aranceles, entre las que destacan:
- Estímulos fiscales y apoyos directos: Dirigidos a micro, pequeñas y medianas empresas del sector automotriz para fomentar la producción, innovación y exportación.
- Deducción del 100% en gastos por aranceles: Permitir que las empresas deduzcan completamente en el ISR los costos generados por los nuevos aranceles.
- Suspensión temporal del Impuesto Sobre Automóviles Nuevos (ISAN): Aplicable cuando los aranceles superen el 10%, con el objetivo de incentivar el mercado interno y preservar empleos.
- Reducción del IEPS a combustibles: Para evitar el aumento en costos logísticos y proteger la cadena de suministro nacional.
- Creación de un seguro de desempleo y programas de empleo temporal: Enfocados en proteger a los trabajadores del sector automotriz afectados por esta situación.
Romero reiteró la disposición del PAN para colaborar con el Gobierno Federal en una estrategia más integral y efectiva. “Este no es momento de cálculos políticos, es momento de unidad y de defender con toda claridad a la industria nacional. Nosotros no vamos a criticar por criticar, vamos a proponer y a exigir lo que el país necesita”, subrayó.
El dirigente concluyó que estas medidas buscan enfrentar con seriedad las consecuencias de una política comercial hostil y proteccionista que pone en riesgo el bienestar de millones de mexicanos. “Si Estados Unidos endurece su política comercial, México debe endurecer su defensa económica”, enfatizó.