París, 25 may (Prensa Latina) El público parisino y francés despidió hoy de las canchas a un ídolo adoptivo, el tenista español Rafael Nadal, en el arranque del Grand Slam Roland Garros, un torneo que el ibérico ganó 14 veces.
Gracias Rafa es ya una frase universal, por primera ocasión en casi dos décadas, el espectacular jugador no será de la partida en la meca de la tierra batida, en la que su balance de 112 victorias y cuatro derrotas no deja dudas para considerarlo el rey de la arcilla.
Nadal debutó en el segundo Grand Slam de la temporada tenística el 23 de mayo del 2005, ante el alemán Lars Burgsmüller, y pisó el polvo de ladrillo de la Ciudad de la Luz por última vez el año pasado, cuando cayó frente al también germano Alexander Zverev en la primera ronda del certamen.
Una abarrotada cancha Philippe Chatrier dijo adiós esta tarde a Nadal, quien tantas veces la puso a sus pies, dejando en el camino a otras leyendas del deporte blanco, como el suizo Roger Federer y el incombustible serbio Novak Djokovic.
Con visible emoción, Rafa entró solo en la pista, e instantes después retumbó el ¡Vamos!, y las imágenes recordaron la ilustre carrera del mallorquín, dominador en 22 Grand Slam, solo superado por Djokovic (24) y por delante de Federer, ambos presentes en el homenaje.
«Ha sido una historia increíble», subrayó el otrora estelar atleta de 38 años, campeón olímpico en Beijing 2008.
En sus palabras agradeció a los organizadores del Roland Garros y evocó a los grandes rivales que tuvo en la arcilla parisina.
También resaltó el apoyo en su larga trayectoria de entrenadores, preparadores físicos, patrocinadores y amigos, y por supuesto de la familia, muchas de esas personas asistentes al acto en la majestuosa Philippe Chatrier.
Gracias a Francia y a París, aquí me he sentido apreciado, me han hecho sentir como un francés más, ya no podré jugar ante vosotros, pero mi corazón siempre estará unido a este lugar, señaló.