La paz es el camino de la humanidad, afirma sobreviviente rusa

Por Lázaro D. Najarro Pujol

Camagüey, Cuba, 9 may (PL) La sobreviviente rusa Aleftina Primelles, hija de un piloto soviético de la Gran Guerra Patria (1941-1945), afirmó hoy en esta ciudad que la paz es el único camino para salvar a la humanidad y no las hostilidades.
En declaraciones a Prensa Latina la soviética residente en Camagüey, a unos 570 kilómetros al este de La Habana, ilustró que en pleno siglo XXI la tragedia de la guerra se repite en diversos países, impulsada por el imperialismo.
Expuso que según testimonios, fotografías, investigaciones realizadas por ella y otros documentos su padre, Nikolay Kiriushin, llegó a las puertas de Berlín, Alemania, y enfatizó que la segunda Guerra Mundial fue muy dura no solo para los que estaban en el frente sino también para todo el pueblo soviético.
Apuntó, que su abuelo, Fiodor Eliseeva, también fue piloto de guerra, murió en combate y a los 67 años de comenzada la guerra encontraron sus restos y lo pudieron identificar entre otros elementos por las medallas y fue sepultado en su ciudad natal (Malaya Vishera), con todos los honores militares.
Señaló que su mamá, Natalia Eliseeva, sufrió y recibió todo tipo de vejamen durante la ocupación de las tropas de la Alemania nazista en una pequeña comunidad cercana a la vía férrea entre Moscú y la entonces ciudad Heroica de Leningrado, actual San Petersburgo.
Explicó que para evitar el abastecimiento al Ejercito Ruso, ese ramal ferroviario y la ciudad fueron arrasados por los fascistas, bombardeo al que pudo sobrevivir su mamá.
Atestiguó que las mujeres de la casa fueron obligadas a permanecer en condiciones inhumanas en un henil, y a cocinar a los soldados nazis, quienes hacían sus necesidades fisiológicas delante de ellas. Todos los panales de abejas, le contaron, fueron destruidos privándoles del alimento del crudo infierno.
Lo único que quedó para la familia fue una vaca que pudo esconderse en el bosque, aseguró esta mujer que el septiembre venidero cumplirá 70 años de edad, quien cuando la victoria sobre el fascismo el 9 de mayo de 1945 acaba de nacer (Septiembre de 1944. «Estuve en el vientre de mi mamá durante la guerra».
No se puede olvidar la historia para que los tormentos que padeció el pueblo ruso no se repitan jamás, porque lo que hicieron los fascistas alemanes no es propio de los humanos.

Deja tu comentario