Trebisonda, Turquía, 10 jul (PL) La escuadra de Uruguay chocará hoy contra Irak en la etapa de los cuatro mejores de la Copa del Mundo de fútbol sub-20 de Turquía, con la opción latente de regresar a una gran final por primera vez desde 1997.
Enfrentarse al equipo revelación del torneo es una tarea harto compleja para los uruguayos, sin embargo su moral y estado de ánimo llegan por las nubes, tras eliminar en cuartos de final a España, máximo candidato al título, en las quinielas precompetencia.
Hay cientos de formas distintas de jugar el partido. Somos dos equipos fuertes que nunca se rinden, con una buena condición física. Tenemos que disfrutar el momento y, por supuesto, tratar de marcar un gol más que ellos para ir a la final, declaró en conferencia de prensa Gastón Silva, capitán de los celestes.
Las principales basas del seleccionador uruguayo Juan Verzeri serán la solidez defensiva y el olfato goleador del delantero Nicolás López, quien deberá ser abastecido de oportunidades por los talentosos centrocampistas Giorgian de Arrascaeta, y Diego Laxalt.
Hasta la fecha, Uruguay marcó nueve goles y permitió solo dos en cinco partidos, además de mantener su portería en cero en tres de esos desafíos, con destaque especial para el triunfo 1-0 en tiempo extra sobre España, que le otorgó el boleto a la quinta semifinal de su historia en esta categoría.
Si los charrúas conquistaran la victoria ante Irak entonces hubieran igualado su mejor resultado en estas lides juveniles, que data de Malasia-1997, cuando llegaron a la gran final pero finalmente cayeron ante la Argentina de Juan Román Riquelme y Pablo Aimar.
Uruguay ostenta un saldo negativo de un triunfo y tres derrotas en semifinales, un factor extra para afrentar con máximo concentración y entrega este duelo ante Irak, pactado en el estadio Hüseyin Avni Aker de la ciudad de Trebisonda, situada al noreste de Turquía, con una población de alrededor de 250 mil habitantes.
La selección uruguaya es una de las mejores de Sudamérica, cuando no la mejor. Y acaba de ganarle a España. Va a ser difícil, pero esperamos hacer otro gran partido, recalcó Hakeem al Azzawi, seleccionador de Irak.
Irak llega a este desafío como el único equipo invicto del campeonato, tras su histórico empate 2-2 ante Inglaterra (que prácticamente eliminó al equipo de los Tres Leones), y victorias consecutivas sobre Egipto (2-1), Chile (2-1), Paraguay (1-0, en tiempo extra) y Surcorea (5-4, en penales).
Este conjunto iraquí ya dejó una impronta imperecedera en la historia del fútbol, al convertirse en el primero de esa nación árabe en acceder a semifinales en campeonatos del mundo, en todas las categorías.
Tengo la convicción de que estaremos en la final, exaltó Al Azzawi, un apasionado al fútbol con los pies bien firmes sobre la tierra, pero que vive el presente como nadie, gracias a la extraordinaria labor de sus discípulos.
Francia y Ghana chocarán en la otra semifinal, pactada en el estadio Atatürk de la urbe turca de Bursa, al noroeste del país.
El equipo galo saldrá como favorito en las apuestas, amparado en su poderoso ataque (13 goles marcados en cinco partidos) y las notables carencias defensivas de los ghaneses (10 tantos permitidos en cinco desafíos).
Este choque tendrá sabor a revancha, pues europeos y africanos chocaron en el grupo A de la fase eliminatoria, con triunfo 3-1 para los primeros, tras empate 0-0 en la primera mitad.
Los franceses nunca han clasificado a un final en esta categoría y ostenta el cuarto lugar en Colombia-2011 como mejor resultado, mientras Ghana se coronó monarca del orbe en Egipto-2009, además de haber perdido otros dos partidos por el título en Argentina-1999 y Australia-1993.
La historia de los mundiales sub-20 favorece de largo a Ghana, sin embargo Francia hoy día es un equipo más compacto, comandado por el fuera de serie Paul Pogba, centrocampista del Juventus de Turín del fútbol italiano.
Si franceses y uruguayos lograran sortear estos obstáculos, entonces el escenario quedaría listo para la octava final entre América y Europa.
Anteriormente, en estos duelos ‘particularesâ€Ö, los equipos americanos, exclusivamente Argentina (1979, 2007) y Brasil (1985, 2003, 2011), vencieron en cinco de siete ocasiones, mientras los del Viejo Continente solo en dos, Unión Soviética en 1977 y Portugal en 1991.