Washington, 21 sep (PL) El equinoccio de otoño llega este domingo para los habitantes del hemisferio norte, quienes además disfrutan por estos días de un bello fenómeno celeste, la luna llena de septiembre o luna de cosecha.
Explican astrónomos que desde días antes del cambio de estación, sucede este lindo espectáculo, caracterizado por un cielo de color rojo iluminado por la luz de la luna. En este período, los días y las noches tienen casi la misma duración.
Además, el satélite terrestre se nota mucho más grande de lo habitual, una ilusión óptica causada por la atmósfera, y en tonos rojizos, ya que sale sincronizada con la puesta de Sol. Son los únicos días del año en que no hay oscuridad y la luna brilla toda la noche, indican.
También señalan que con unos prismáticos se podrá observar a los planetas Venus y Saturno, que parecerán estar muy próximos uno del otro.