Madrid, 16 feb (PL) El movimiento contra la privatización de hospitales españoles salió hoy de nuevo a las calles en demanda de suspender la práctica de desvío de finanzas públicas con remisiones de centros públicos a clínicas particulares.
Miles de personas recorrieron calles céntricas de Madrid tal como hicieron en el pasado para lograr que las autoridades de esa comunidad suspendieran un criticado programa de privatización de seis hospitales.
Rosa Cuadrado, secretaria general de la Federación de Sanidad de la central sindical Comisiones Obreras, advirtió durante la demostración de la denominada Marea Blanca que se continúan realizando procesos encubiertos de privatización.
Participaron en la manifestación empleados del Centro de Transfusiones de la Comunidad de Madrid, quienes llevan 14 días encerrados en la instalación como protesta por un convenio entre la Consejería de Sanidad y la Cruz Roja que consideran irracional.
Por la Unión General de Trabajadores, otra central sindical española, Ignacio Hernández advirtió sobre la necesidad de permanecer alerta para garantizar que servicios como el de donación de sangre sigan siendo públicos.
Las organizaciones participantes demandan también la retirada de un proyecto de ley de aborto, que solo permitiría las interrupciones de embarazo en casos de violación o peligro para la vida y con procedimientos muy rigurosos.
Exigen asimismo que la paralización del proceso de privatización sea avalada en resoluciones oficiales para evitar en el futuro otro nuevo intento y la re-nacionalización de la Lavandería Central Hospitalaria que fue entregada al sector privado.