Moscú, 22 jul (PL) El presidente Vladimir Putin advirtió hoy sobre el reforzamiento de tropas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el este europeo y de una reacción simétrica de Rusia a las amenazas a su seguridad e integridad territorial.
Las agrupaciones de la OTAN de manera demostrativa se fortalecen en territorio de los estados europeos orientales y nosotros vamos a reaccionar de manera adecuada y proporcionada frente a la proximidad de la infraestructura del bloque a nuestras fronteras, afirmó Putin en la sesión del Consejo de Seguridad.
Precisó el mandatario que Moscú presta debida atención al emplazamiento del sistema global antimisiles -de Estados Unidos en Europa- y la concentración de arsenales de armamentos de alta precisión.
Con regularidad nos hablan de que el sistema antimisiles (el escudo) «es un sistema defensivo, pero no hay nada de eso, es un sistema ofensivo, parte del sistema de defensa estratégico de Estados Unidos desplazado en la periferia», puntualizó el dignatario ante los miembros del Consejo, convocado en circunstancias de una retórica agresiva de Occidente, sanciones y acusaciones.
Observó Putin que con independencia de lo que afirman los «colegas extranjeros» ellos (Rusia) entienden que sucede en la práctica, con un incremento de las tropas en el este europeo y las agrupaciones de la OTAN en los mares Negro y Báltico, en un añejo plan de cercar a la nación euroasiática, por el occidente, norte y sur.
Crecen -acotó- la intensidad y la magnitud de la preparación operativa y combativa de los aliados, de ahí que consideró apremiante la ejecución en el plazo previsto de todas las medidas enfiladas al fortalecimiento de la capacidad defensiva del país, con especial atención a Crimea y Sebastopol, la base de la flota rusa del mar Negro.
Al mismo tiempo, Putin consideró ante la plana mayor del Ejército y todas las estructuras de fuerza que por el momento no existe una amenaza militar directa a la soberanía y a la integridad territorial de Rusia.
Atribuyó tal afirmación al equilibrio estratégico de fuerzas que existe en el mundo, según Putin, quien insistió en que Rusia cumple estrictamente las normas del derecho internacional y sus compromisos ante los socios.
Otra premisa que destacó el mandatario es que Moscú no forma alianzas, lo cual representa a su juicio una cierta garantía para la soberanía.
Putin confió igualmente en que los intereses nacionales de Rusia se tendrán en cuenta y que las cuestiones controversiales puedan solucionarse exclusivamente por medios diplomáticos y las negociaciones.
Nadie, sin embargo, va a inmiscuirse en nuestros asuntos internos, aseveró Putin, al poner bajo escrutinio el concepto de democracia en algunos países y de los mecanismos de férrea competencia en la arena internacional, en lo económico y político, además de sofisticados métodos de injerencia.
Como tarea, dijo que debían reaccionar de forma adecuada a esas amenazas (como la erosión interna con las llamadas «fuerzas blandas») trabajar de manera sistémica a fin de solucionar los problemas que puedan representar un peligro a la unidad del país y la sociedad, enfatizó Putin.
El Consejo de Seguridad fue convocado por el jefe de Estado ruso en momentos de una nueva oleada de amenazas de sanciones contra Rusia y acusaciones de una supuesta responsabilidad de este país en la catástrofe aérea del avión malasio en Ucrania.
Putin advierte de reforzamiento de tropas de OTAN en el este
