Washington, 10 sep (PL) Las últimas elecciones primarias de 2014 concluyeron en cinco estados de la Unión ubicados en noreste del país, cuando ya están próximos los comicios legislativos del 4 de noviembre.
En New Hampshire, Scott Brown, quien fue senador de Massachusetts hasta perder el puesto en 2012, se alzó con la victoria en las primarias republicanas para enfrentarse a la demócrata Jeanne Shaheen.
Algunos entendidos auguran que la pelea entre Brown y Shaheen será clave para decidir qué partido controlará el Senado (ahora con mayoría demócrata) durante los dos años que le quedan al presidente Barack Obama en la Casa Blanca.
Sin embargo, la mayor sorpresa anoche fue Seth Moulton, un veterano de la guerra de Iraq y recién llegado al mundo político, que venció en Massachusetts al legislador demócrata durante nueve mandatos, John Tierney.
Mientras en Nueva York, el gobernador demócrata Andrew Cuomo ganó la nominación de su agrupación política al relegar a su principal rival, Zephyr Teachout.
Según apreciaciones de prensa, con más del 35 por ciento de los votos, Teachout presentó el mayor desafío a un gobernador actual desde que comenzaran las primarias del estado, en 1970.
En las venideras elecciones de medio término se renovarán por completo la Cámara de Representantes (435 puestos), 33 escaños del Senado (de 100), más de dos tercios de los gobernadores estatales y numerosos cargos locales.
La tradición señala que las mid-term elections (como se denominan en inglés) suponen un test para los políticos, en especial para los del partido en el poder, en este caso el Demócrata.
Pero a estos sufragios, antesala de la campaña presidencial de 2016, el presidente Barack Obama llega sin buena parte del magnetismo que le dio el triunfo en 2008, un factor que a juicio de los observadores sería definitorio en noviembre.
Una encuesta divulgada la víspera le dio bajas calificaciones al gobernante, en particular con opiniones negativas acerca de su liderazgo y su papel en política exterior.