Rusia refuerza defensa con radares en flanco occidental

Moscú, 30 sep (PL) El coronel Oleg Koshetkov, portavoz del Distrito Militar Oeste (DMO) de Rusia, aseguró hoy que ese flanco reforzará su capacidad de vigilancia radioelectrónica con la entrada en disposición combativa de 10 novedosos radares.
Koshetkov informó que una decena de esos ingenios del tipo Nebo-U y Sopka entrarán en operaciones en los próximos días en unidades de defensa antiaérea del DMO en las provincias de Leningrado, Múrmansk y Arjángelsk.
Los sistemas ya están desplegados y listos para proteger las fronteras aéreas del noroeste de Rusia, informó el oficial.
Otros seis radares polivalentes del tipo Kasta-2E2, Gamma-S1M, Podlet y Rezonans serán entregados antes de que concluya 2014, según la fuente.
Estos nuevos equipos con alcance de hasta 400 kilómetros permitirán a las fuerzas del DMO vigilar el espacio aéreo en una altura que abarca desde varios metros hasta decenas de kilómetros.
Rusia emplazó en junio el radar de alerta temprana Voronezh-DM, que inició la fase experimental en el punto más occidental del país, el enclave de Kaliningrado, situado entre Lituania y Polonia, confirmó el servicio de prensa de la empresa Spetsstroy.
Se desarrollan las pruebas de homologación en el actual trimestre, tras lo cual el equipo de radiolocalización entrará en servicio operacional, aseguró la corporación.
Con un barrido de seis mil kilómetros, este medio de vigilancia puede seguir simultáneamente hasta 500 objetivos y controlar el espacio aéreo sobre todo en el continente europeo y el océano Atlántico.
La puesta en disposición combativa de estos equipos transcurre simultáneamente a las maniobras de fuerzas de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN cerca de Rusia.
Esos ejercicios comenzaron en Letonia con los juegos de guerra de la OTAN denominados «Steadfast Javelin 2» y continuaron en aguas ucranianas del mar Negro.
Para el resto del año están programadas otras maniobras denominadas Loyal Lance (en Alemania), Noble Ledger (en Noruega), Rapid Trident (en territorio de  Ucrania), Anakonda, en Polonia, y Trident Lance, en Alemania.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rassmusen, confirmó recientemente que, por primera vez, serán desplegadas tropas permanentes en nuevas bases emplazadas en países de Europa del Este cuyas fronteras colindan con Rusia como Lituania, Estonia y Letonia.
Tales amenazas, inexistentes incluso durante la Guerra Fría, obligan a actualizar la Doctrina Militar de Rusia antes de que concluya 2014 y a continuar con mayor celeridad su programa de rearme de las Fuerzas Armadas, según el subsecretario del Consejo de Seguridad Nacional, Mijail Popov.

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