México, 6 oct (PL) El presidente Enrique Peña Nieto repudió hoy la matanza y desaparición de estudiantes en el estado mexicano de Guerrero y ordenó una profunda investigación sobre los hechos.
El jefe de Estado, en un mensaje a los medios de comunicación, calificó de «indignantes e inaceptables» lo ocurrido el pasado 27 de septiembre en el municipio de Iguala, donde murieron seis personas, entre ellas tres estudiantes de una escuela normalista rural, que mantiene a 43 de sus docentes desaparecidos.
Tras lamentar la represión contra los estudiantes, señaló que giró instrucciones para que el gobierno federal participe en el debido esclarecimiento de los hechos, encontrar a los responsables y aplicar la ley.
El objetivo, dijo, es «conocer la verdad y asegurar que se aplique la ley a los responsables de hechos indignantes e inaceptables».
Según las informaciones desde Guerrero, existe confirmación de que los responsables de los actos de violencia fueron policías municipales y sicarios del crimen organizado, en particular del grupo Guerreros Unidos.
El procurador de Guerrero, Iñaky Blanco, dio a conocer que después de la matanza en Iguala, 17 estudiantes fueron detenidos por los agentes y posteriormente llevados a una vereda en Pueblo Viejo, en la periferia de Iguala, donde fueron ejecutados.
Allí fueron localizadas varias fosas clandestinas de las que, hasta ayer domingo, las autoridades ministeriales habían exhumado 28 cadáveres, algunos de ellos calcinados.