Por Héctor Miranda
La Paz, 27 ene (PL) La Paz, conocida hoy como la capital ubicada a mayor altitud en el mundo, se convertirá en breve en la ciudad del teleférico, tras la promulgación por el presidente Evo Morales de una ley para construir seis nuevas líneas.
El jefe de Estado promulgó la víspera la nueva norma que da luz verde a una inversión de 450 millones de dólares para levantar otros seis ramales del novedoso medio de transporte, el cual gana cada vez más adeptos en esta urbe, ubicada cerca de los cuatro mil metros sobre el nivel del mar.
Desde comienzos del año anterior los paceños comenzaron su adaptación al funicular, cuyas labores se iniciaron por la Línea Roja, la cual enlaza la avenida 16 de julio, en la aledaña ciudad de El Alto, con la antigua estación de ferrocarriles, al centro capitalino.
Poco después inició sus labores la Línea Amarilla, con trayecto desde la Curva de Holguín, hacia el sur de la urbe, hasta Ciudad Satélite, también en El Alto, en tanto a finales de octubre se puso en marcha la verde, la cual enlaza a la Amarilla con la zona de Irpavi, en la parte meridional paceña.
Según Morales el sistema de teleféricos es un motivo de orgullo boliviano porque la semana pasada los mandatarios de Ecuador, Rafael Correa, y de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, quisieron conocerlo, durante su visita a La Paz, y se plantearon obras similares para sus países.
Ambos mandatarios, que estuvieron en el país para la investidura de Morales, quedaron impactados por el funicular, cuya segunda fase incluirá la construcción de 23 estaciones y más de 20 kilómetros de líneas, cifras muy superiores a las 11 estaciones actuales y a los casi 10 kilómetros.
Hasta ahora y luego de ocho meses, según el gerente de la Empresa del Teleférico, César Dockweiller, más de 14 millones de pasajeros utilizaron el referido medio de transporte, cifras que serán superadas en el presente año.
Dockweiller destacó recientemente que el 25 de diciembre pasado la Línea Amarilla movió a 76 mil personas, una cifra que dobla la más alta cifra anterior, cercana a los 35 mil pasajeros y conseguida por un funicular venezolano.
Las nuevas líneas, también nombradas por sus colores, permitirán unir los suburbios de La Paz con el centro de la misma, unas veces directamente y otras por enlace con las ya existentes.