Katmandú, 11 may (PL) Las réplicas del sismo del 25 de abril en Nepal constituyen una seria amenaza para una veintena de glaciares de la montañosa nación del Himalaya y, de rebote, para la población asentada en las áreas circundantes.
El terremoto mismo y los posteriores movimientos han debilitado mucho la estabilidad de la corteza terrestre en una amplia región, incluida esta donde se asientan los glaciares, advirtió hoy el jefe del Centro Universitario para la Meteorología y la Hidrología, Rijan Bhaktha Kayastha.
Según el experto, hay por lo menos 20 glaciares vulnerables en zonas de riesgo sísmico y tres de los lagos que determinan -el Thulagi, el Tsho Rolpa el y el Imja- podrían representar una amenaza seria.
En los 15 días transcurridos desde el sismo de 7,9 grados el Centro Sismológico de Nepal ha registrado más de 160 réplicas. Los muertos por la colosal remezón pasan de ocho mil y cualquier nuevo movimiento aterroriza a la población de la pequeña nación surasiática.
Su fuerza fue tan descomunal que, según investigaciones realizadas con la técnica del GPS, elevó unos 80 centímetros el valle de Katmandú, donde reposa esta capital. El sacudón fue claramente perceptible en India, China, Bangladesh, Bután y Pakistán.
Kayastha dijo que imágenes de satélite muestran un nivel normal de agua en los glaciares, pero apuntó que serán necesarios estudios de campo para evaluar mejor la situación.