Brasilia, 24 jun (PL) La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, presentará hoy el Plan Nacional de Exportaciones (PNE) que busca simplificar la burocracia, estimular y diversificar las ventas de mercancías y productos elaborados.
El PNE incluye normas de facilitación y reducción del proceso de exportación, medidas fiscales, así como apoyo financiero y seguro, destacó el ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Armando Monteiro.
Se trata de ofrecer al sector exportador ayuda, garantías y otros beneficios que disminuyan el tiempo de despacho en las aduanas y el tránsito de mercancías, subrayó.
Se pronunció por la importancia de explorar varios frentes para la venta de las producciones, entre los cuales mencionó a Estados Unidos, naciones suramericanas, de África y Asia, con miras a superar el déficit en la balanza comercial.
Según cálculos oficiales, Brasil acumula un déficit en sus ventas al exterior de dos mil 300 millones de reales de enero a mayo último, lo cual representa menos de la mitad de las pérdidas registradas en igual periodo de 2014.
Sin embargo, las previsiones del gobierno es terminar este 2015 con el superávit comercial de entre cinco mil millones de reales (mil 639 millones de dólares) y ocho mil millones de reales (dos mil 600 millones de dólares).
El Plan Nacional forma parte del esfuerzo de la mandataria de Brasil de establecer una agenda positiva para neutralizar los efectos de la crisis económica en el país, y superar las actuales dificultades económicas.
Rousseff cuenta con una agenda de futuro, compuesta por los programas de Inversión en Logística, de Agricultura familiar, la propuesta social Mi casa, Mi vida, y el programa de estimulo a las exportaciones.
Estas iniciativas, junto con la política de ajuste fiscal, tienen como objetivo superar los problemas financieros y retomar la senda del crecimiento.