Ciudad de México.- El Zócalo de la Ciudad de México se transformó en un circuito de Fórmula Uno con la escudería de Infiniti Red Bull Racing, que realizaron una demostración del poderío de sus motores.
El estruendo de los motores del monoplaza RB7 se expandió por el Centro Histórico en medio de la algarabía de unos 70 mil espectadores que abarrotaron las calles.
El evento se retrasó 60 minutos, pero Carlos Sainz Jr. fue quien dio inicio a las 11: 10 horas para probar el circuito del Zócalo.
El español se mostró confiado y exhibió su versatilidad al conducir el coche con una mano y hasta con las dos en el aire, mientras maniobraba círculos en la explanada.
A las 11:28 horas Daniel Ricciardo salió de la zona caliente de pits para dar una probada de lo que será el Gran Premio de México el próximo 1 de noviembre en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
La plancha se estremeció cuando sonó el motor del piloto mexicano Gustavo Vildósola a bordo de su Trophy Truck.
El público agradeció las maniobras en tres ruedas realizadas con temple por el tricolor en un palmo de terreno.
Los tres pilotos se unieron y desencadenaron la velocidad de los bólidos, mientras ondeaban la Bandera nacional en medio de un olor a Fórmula Uno.
Fuente: InsurgentePress