Minsk, 19 oct (PL) El club español Barcelona visitará mañana al BATE Borísov belaruso con la intención de ratificarse como puntero del grupo E de Liga de Campeones del fútbol europeo.
Los españoles, actuales campeones del principal torneo continental, tendrá ante si un rival complicado, que llega con el título liguero en su bolsillo.
Los belarusos, que dieron la campanada en la anterior jornada al derrotar en casa al Roma, reciben al Barcelona con la moral por las nubes tras alzarse con su décimo título de liga consecutivo.
El BATE Borisov es un viejo conocido del equipo catalán, ya que estuvieron en el mismo grupo europeo hace cuatro temporadas, con un parcial de 9-0 para el actual campeón de la Champions.
Así, el conjunto español goleó (0-5) de visitante, que entonces disputaba sus partidos como local en el Estadio Dinamo de Monsk, y en el Camp Nou, el Barça se impuso también con contundencia (4-0).
El partido ante el Barcelona será una fiesta para nosotros. No tenemos miedo, sólo respeto por nuestro rival. Hubiéramos preferido que Messi jugara. Hubiera sido divertido ver a esa leyenda en el campo, el técnico del beloruso Alexandr Yermakovich.
Reconoció que hace cuatro temporadas, cuando también coincidieron con el equipo español en la fase de grupos, «sobrecargaron» a los jugadores con demasiadas explicaciones tácticas, lo que no evitó que el BATE «sufriera dos abultadas derrotas».
Dada la experiencia negativa, esta vez decidimos reducir a la mínima expresión los preparativos tácticos. El partido decidirá nuestro futuro. Toda la plantilla está excitada. La responsabilidad es grande, pero tenemos que jugar bien, destacó el DT.
A diferencia de hace cuatro temporadas, ahora el BATE disputa sus partidos europeos no en Minsk, sino en su propio estadio, el Borísov Arena, un pequeño pero moderno terreno inaugurado en 2014.