Beijing, 18 ene (PL) La economía china, pese a su ralentización, es hoy una de las de más rápido crecimiento del mundo, afirmó aquí el primer ministro de esta nación, Li Keqiang.
Ante una audiencia con motivo de diversas actividades que concluyen este lunes con motivo de la inauguración del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), el gobernante defendió que pese a los desafíos de una economía mundial desacelerada y de las dificultades domésticas, China es sumamente resiliente y tiene un espacio considerable para el reajuste.
El empleo se encuentra en un buen nivel y los ingresos de las familias urbanas y rurales crecen establemente, detalló.
También se visualizan cambios en la estructura económica, enfatizó Li.
Al respecto, indicó que el sector de los servicios ya constituye la mitad del producto interno bruto, el consumo contribuye con cerca del 60 por ciento del crecimiento económico y ha habido una progresión importante en las tecnologías, productos y formas de negocios.
De acuerdo con el primer ministro, Beijing aprovechará las oportunidades en el manejo de los desafíos. Se harán grandes esfuerzos para desarrollar la reforma estructural e implementar la estrategia de desarrollo impulsada por la innovación.
Sin embargo, aclaró que se promoverá el espíritu emprendedor masivo y la innovación e impulsarán nuevos motores de desarrollo, al tiempo que se mejora y modernizan las ventajas tradicionales.
Por otra parte, recordó que con mil 300 millones de habitantes, este territorio cuenta con una mano de obra de 900 millones y 150 millones de profesionales capacitados.
El crecimiento económico chino dependerá menos de los recursos naturales y más de los recursos humanos, enfatizó.
Tras exponer esos datos, consideró que China tiene la capacidad de mantener un crecimiento medio-alto y lograr igual nivel de desarrollo.
En su opinión, ello generará más oportunidades para la economía mundial.