México, 21 ene (PL) El petróleo mexicano de exportación tiene el reto hoy de remontar uno de sus desplomes más fuertes, mientras que para la moneda nacional y la Bolsa de Valores local el panorama tampoco parece halagüeño.
La víspera fue aciaga para uno de los rubros principales de ingresos de divisas del país. La mezcla del crudo registró la mayor caída de su valor desde febrero de 2002.
El petróleo mexicano perdió 5,59 por ciento el miércoles y cerró en 18,90 por barril, con una reducción de 1,12 dólares por tonel, según Pemex, la empresa petrolera paraestatal.
Tal situación no ocurría desde febrero de 2002, cuando el crudo nacional se cotizaba a 16,18 dólares.
Solo en lo que va de enero el petróleo mexicano perdió casi 31 por ciento de su precio, en un escenario en que otros exportadores del crudo también resienten la tendencia decreciente en el mercado mundial.
Junto a ello, la Bolsa Mexicana de Valores cerró con pérdidas, algo similar a la moneda nacional, que amenaza con alcanzar la barrera de 19 unidades por dólar.
Hace dos días el gobernador del Banco de México, Agustín Castens, declaró al diario Financial Times que los países emergentes, entre los que se incluye México, «deben estar preparados para una crisis potencialmente severa y de consecuencias violentas».
Sin embargo, el presidente Enrique Peña Nieto y otros altos funcionarios de su gabinete económico aseguran que el país es de los que mejor están preparados para enfrentar la adversa coyuntura económica y financiera internacional.
BMV, petróleo y el peso continúan sus bajas expectativas de crecimiento
