Cientos de personas realizaron una caminata silenciosa en esta capital de estado de Puebla, para exigir justicia por los casos de feminicidio y desaparición de mujeres en la entidad en meses recientes.
Encabezado por las familias de víctimas de feminicidio y mujeres desaparecidas, marchó un consternado contingente de más de 500 personas, conformado por mujeres y hombres vestidos de negro de todas las edades y condición social.
Con pancartas en las que se leía “Ni una menos”, “Ni una poblana más”, “El feminicidio es responsabilidad del homicida, nunca de la víctima”, y “Macho hipócrita, defiendes al no nacido y matas a las nacidas”, entre otras consignas, el contingente recorrió desde el Paseo Bravo, por la calle principal de Reforma, hasta llegar al Zócalo poblano y realizar un emotivo mitin.
En la entidad, el Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) registró, mediante un seguimiento hemerográfico, 145 casos de asesinatos violentos de mujeres desde 2013, cuando se tipificó el delito de feminicidio, de los cuales sólo 17 han sido consignados por este crimen. El Odesyr reporta 16 casos en apenas dos meses de 2016.
María del Carmen González Hernández, originaria del municipio de Cholula y estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), acudió a la marcha acompañado de su hijo de dos años de edad.
“Pienso que todas corremos el mismo riesgo, por eso estoy aquí; vienen las familias, pero también están las mujeres que nadie está buscando, las que nadie nombra, las que encuentran muertas en la periferia y ni siquiera sabíamos cuál era su nombre verdadero”, dijo al referirse a los dos cuerpos de mujeres hallados en las localidades de San Gregorio Zacapechpan, San Pedro Cholula y San Jerónimo Caleras, y que están en calidad de “desconocidas”.
En el corazón del Centro Histórico poblano, las familiares de mujeres desaparecidas denunciaron que la Fiscalía General del estado, encabezada por Víctor Carrancá Bourguet, no ha dado respuesta a la petición de buscar a sus hijas, y que por el contrario, les sugiere que “se fueron con el novio” y que “pronto regresarán”.
Rocío Limón Alvarado, madre de Paulina Camargo Limón, joven de 19 años, recordó que hace seis meses su hija desapareció y que presentaba un embarazo de 18 semanas. Contó que su asesino confeso, su ex pareja José María Sosa Álvarez, lleno de ira mató a Paulina de forma violenta.
La mujer instó a la sociedad poblana para que despierte y exija justicia, y deseó que ninguna familia sea tocada por este dolor.
María Montes denunció que su hija María Fernanda Montes, de 14 años, desaparecida el 28 de noviembre de 2013, fue asesinada por su novio, y a pesar de poner la denuncia correspondiente, el responsable sigue prófugo. “Voy a la fiscalía y me dicen lo mismo: que la investigación sigue abierta”, acusó.
Argelia Romero, madre de Olga Nayeli Sosa Romero, estudiante de la BUAP asesinada por su pareja, el médico Moisés Torres López, rompió en llanto al denunciar que la custodia de su nieto la tiene compartida con los padres del asesino de su hija, quien también fue cómplice en ocultamiento de pruebas.
Carmen Paredes también tomó el micrófono durante el mitin y dijo que su hija Blanca Estela Solar Paredes, de 16 años, desapareció el pasado 12 de enero presuntamente “enganchada” por su novio Valentín Santiago Juárez, de 21 años y originario del municipio de Zacatlán de las Manzanas.
La mujer acudió al Ministerio Público porque sospecha que su hija puede ser víctima de redes de trata de personas, pero las autoridades le dijeron que ella misma investigue y encuentre a la joven.
Una adulta mayor también subió al escenario y llamó a la sociedad a organizarse: “Así nos tratan porque ven que no estamos organizados. Estos gobernantes sólo quieren una Puebla bonita de hoteles para que vengan los turistas. Ya ven, ni un voto al PAN”.
A lo que la gente congregada en la plaza exclamó: “¡Ni al PRI!”.
El pasado sábado fue encontrada asesinada Samaí Márquez Salgado, de 25 años de edad y con ocho semanas de embarazo. Fue ultimada presuntamente por su pareja sentimental, Rafael Portillo Abundis, quien se espera sea consignado por feminicidio. Este crimen indignó a la población y se inició la campaña #JusticiaparaSamai.
La Articulación Feminista Poblana leyó un pronunciamiento para exigir medidas urgentes al Ejecutivo estatal, entre ellas: la aplicación del Protocolo Alba para localizar a mujeres desaparecidas sin importar su edad; disposición de personal para la búsqueda inmediata, y la conformación de una comisión revisora de expertos de todos los casos calificados como homicidios dolosos de mujeres.
EXIGEN NUEVO PROTOCOLO
Este jueves 25 por la mañana, un contingente feminista protestó frente al Congreso local, donde comparecía el fiscal Carrancá Bourguet, para exigir un nuevo protocolo que reconozca todos los casos de feminicidio.
Con tambores y consignas como “Alerta vecina, feminicida en la esquina”, las decenas de activistas también se dirigieron a la Comisión de Derechos Humanos estatal para clausurarla simbólicamente, toda vez que se ha negado a solicitar la Alerta de Violencia de Género (AVG) al gobierno poblano y las instancias correspondientes.
Fuente: Cimacnoticias