Washington, 29 feb (PL) El senador por Florida y aspirante a la nominación republicana, Marco Rubio, intensificó hoy sus ataques contra Donald Trump para tratar de apuntalar su posición de segundo en la puja partidista.
Según el diario The New York Times, el político acudió al estilo controversial del puntero con ataques sucios y oportunistas, algo que se hizo viral en sus actos de campaña en los últimos días.
El senador calificó al magnate neoyorquino de «estafador» y reiteró que este no es un conservador, además de señalar en una comparecencia el domingo ante la televisión que su rival se negó a repudiar la supremacía blanca, a David Duke o el Ku Klux Klan.
En su empeño por mantenerse en la carrera, el senador por Florida recurrió a tácticas incendiarias propias de Trump, sin embargo, los últimos sondeos indican que no se perfila como ganador en ninguno de los concursos del Súper Martes, donde votarán 10 estados.
La campaña del político al parecer concluyó que la única manera de vencerlo era lanzar provocaciones e insultos contra el puntero para lograr fallas en sus respuestas. Llegamos a la conclusión de que si ser parte del circo es el precio que hay que pagar para mantenernos, eso es lo que vamos a hacer, dijo Todd Harris, un asesor de alto nivel de Rubio.
Sin embargo, análisis de prensa sostienen que pese a su desenfreno de último momento, el político del estado del Sol no logra que la gente vibre en sus mítines de campaña ni tampoco mueve la masas de seguidores incondicionales como lo hace Trump.
De cara al Supermartes, el historial empresarial del magnate ofrece oportunidades para reforzar tanto la postura de los votantes que lo apoyan como la de sus críticos.
Ante el reto que supone el empresario, el establishment (establecimiento) republicano protagoniza un esfuerzo desesperado por detenerlo y en esa línea, Rubio juega su papel, aunque los pronósticos no son nada favorables para él.
Senador Rubio ataca a Trump en busca de mayor popularidad
