Tokio, 23 mar (PL) El gobernador de la prefectura japonesa de Okinawa, Takeshi Onaga, llamó hoy al gobierno central agilizar el traslado de la base militar estadounidense fuera de la isla.
Onaga envió un vocero al Ministerio del Interior japonés para manejar la polémica ante un tribunal creado para mediar entre el gobierno central y las dependencias locales.
El llamado acontece justo cuando el soldado estadounidense Justin Castellanos, de 24 años, confesó la violación a una turista japonesa de 40 años en un hotel de la ciudad de Naha, donde ambos se hospedaban.
La Estación Aérea Futenma será emplazada en un antiguo vertedero de la ciudad de Nago, tras habilitar el área.
Según un acuerdo signado entre Japón y Estados Unidos, la base, que ahora se encuentra en una zona densamente poblada de la ciudad de Ginowan, se trasladará cuando estén listas nuevas instalaciones.
La instalación militar norteamericana de Okinawa alberga a más de la mitad de los casi 48 mil marines destinados en Japón.
Desde la intervención hace más de 70 años, los residentes del archipiélago exigieron la retirada de la base por contaminar el medio ambiente y emitir ruidos excesivos a causa de los aviones.