La Auditoría Superior de la Federación (ASF) informó a los diputados federales de la Comisión de Vigilancia de este ente fiscalizador que a nivel nacional solo dos por ciento de los permisionarios de agua pagan el consumo del vital líquido.
Al presentar el resultado del análisis de la Cuenta Pública de la Federación 2014, el auditor Especial de Desempeño de la ASF, Roberto Salcedo Aquino reconoció que del análisis se desprende que existe una mala administración, ya que se dan los permisos pero no se paga su consumo.
“Se han dado los permisos de agua y no se está midiendo el agua de los permisionarios. No sabemos cuánta agua están sacando a los que se les han dado permiso y además solo el dos por ciento paga”, precisó.
En la reunión del titular de la ASF, Juan Manuel Portal Martínez y su equipo de auditores, con la comisión legislativa mencionada, Salcedo Aquino indicó que la situación es muy complicada y por ello el agua se ha convertido en un asunto de seguridad nacional.
Al responder las dudas de los diputados sobre este tema, comentó que en el año 2000 había 14 mil metros cuadrados por habitantes, pero en 2016 debido al deterioro en la calidad y la cantidad de agua se cuenta con tres mil 500 metros cúbicos por habitante.
“Es decir, cinco mil metros cúbicos por debajo de los estándares internacionales. En el año 2000 teníamos 14 mil metros cúbicos por habitante y los estándares internacionales nos dicen que debemos tener cinco mil metros cúbicos por habitante”.
Ese año, agregó, “estábamos tranquilos pero el deterioro de la calidad y la cantidad del agua hizo que en 2014 se subiera a nuestras leyes que el agua es un asunto de seguridad nacional”.
El auditor Especial de Desempeño señaló que a pesar del poco líquido que se tiene en el país, solo 47 por ciento es tratado y el resto se va a contaminar los cuerpos de agua.
Puntualizó que en el análisis que hizo la ASF se detectó que no se aplica el programa de “Quien contamina paga” y solo se han encontrado casos aislados.