Washington, 14 jul (PL) El Congreso de Estados Unidos inicia hoy un receso de siete semanas de vacaciones sin alcanzar acuerdos en temas tan puntuales como el control de armas, la batalla contra el virus del Zika y el presupuesto fiscal.
Tanto los miembros de la Cámara de Representantes como del Senado estadounidense no regresarán al Capitolio hasta después de la celebración del Día del Trabajo (Labor Day) que se celebra en la primera semana de septiembre.
Tradicionalmente, el Congreso de Estados Unidos recesa durante el mes de agosto, pero este año el receso se prolongará debido a las convenciones partidistas que se celebrarán antes de las elecciones presidenciales.
Los republicanos echarán a andar su Convención Nacional el próximo lunes, en la ciudad de Cleveland, Ohio, donde Donald Trump buscará reafirmarse como el candidato presidencial por el partido rojo.
En tanto los demócratas celebrarán su convención el 25 de julio en Filadelfia, escenario ideal para que Hillary Clinton sea proclamada como la candidata oficial del partido azul a los comicios.
Entre los temas que deja pendiente el Congreso está la discusión sobre un proyecto de ley que controlaría las armas de fuego, una discusión polémica entre demócratas y republicanos que no llegan a adoptar un acuerdo común.
También quedará sobre la mesa de los legisladores un compromiso pendiente para financiar la lucha contra la propagación del virus del Zika, después que los demócratas bloquearan la propuesta republicana de reducir el presupuesto solicitado por la Casa Blanca para combatir el flagelo.
Cuando los legisladores norteamericanos vuelvan a reunirse en la primera semana de septiembre, tendrán apenas un mes para evitar el cierre del gobierno, en caso de aprobar los proyectos pendientes de gastos públicos, que incluyen el financiamiento de programas para combatir la adicción a opiáceos y las muertes por sobredosis de drogas.
Congresistas de EE.UU. se van de vacaciones dejando temas pendientes en la agenda
