México, 5 ago (PL) El Sindicato Nacional de Mineros exige hoy una pesquisa independiente del derrame de millones de litros de tóxicos en los ríos Sonora y Bacanuchi, ocurrido hace dos años en la mina Buenavista del Cobre de Grupo México.
Considerada la mayor tragedia ambiental en la historia del país, hasta la fecha siguen contaminados estos afluentes, las presas y los medios de subsistencia de la población, así como avanzan los daños a la salud de los habitantes.
Según trascendió, autoridades, los gobiernos federal y estatal y el Grupo México ignoran las denuncias penales emprendidas contra el consorcio por el mencionado sindicato y su dirigente, Napoleón Gómez Urrutia.
La organización precisó que los estragos a la naturaleza en esa región son evidentes, ya que los habitantes -sobre todo niños y mujeres- siguen presentando enfermedades relacionadas con el uso del agua contaminada.
Son más de 200 kilómetros de cuencas afectados en los municipios de Cananea, Arizpe, Ures, San Felipe, Banámichi, Baviócara y Hermosillo, en el norteño estado de Sonora.
Sostuvo que el 6 de agosto de 2014 la mina Buenavista del Cobre, llamada así por Grupo México, derramó 40 millones de litros de ácido sulfúrico, tóxicos y metales pesados en los ríos señalados.
Gómez y el sindicato que dirige fueron los primeros en presentar una denuncia penal contra Grupo México, quien incluso sustituyó el nombre original del yacimiento denominado Minera de Cananea.
Demandó que se realice con urgencia una investigación a fondo de los daños ecológicos y ambientales en Sonora, a cargo de especialistas independientes e imparciales, indica este viernes el diario La Jornada.
El 24 de septiembre de 2014 la Comisión Nacional del Agua declaró que el río Sonora registra concentraciones de arsénico, cadmio, cobre, cromo y mercurio por encima de los límites máximos establecidos, subrayó.