- Las Cuevas Pintadas, en la Sierra de La Giganta, en BCS, ha sido afectado por la lluvia y la intensa actividad ciclónica.
CIUDAD DE MÉXICO.- Expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) trabajan en la restauración del sitio arqueológico con pintura rupestre Cuevas Pintadas, en Loreto, Baja California Sur (BCS), dañado por ciclones en los últimos años.
Según informa Notimex, en un comunicado, el INAH precisó que el sitio localizado en la Sierra de La Giganta ha sido afectado por la lluvia y arrastre de materiales ocasionado por la intensa actividad ciclónica registrada en los últimos tres años.
Para estos trabajos se preparó un plan de intervención que incluyo la liberación de los motivos pictóricos sepultados bajo piedras y sedimentos, sin que fueran lastimados o expuestos a cambio climáticos que les dañaran.
Además, se esperó el momento climático adecuado, al mismo tiempo que el Centro INAH-BCS aplicó un monitoreo sobre el sitio y se ha gestionado el seguro para enfrentar los posibles casos de siniestros naturales.
Puntualizó que “los trabajos los llevan a cabo especialistas en patrimonio gráfico rupestre de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC), dirigidos por Sandra Cruz, en coordinación con el Centro INAH-Baja California Sur”.
Sandra Cruz dijo que sedimentos y rocas arrastradas por la corriente de agua de la zona sepultaron por completo las pinturas, por lo que la recuperación llevará varias etapas.
En la primera se retirará el material que oculta el panel pictórico, que se calcula en 10 mil metros cúbicos; registro fotográfico detallado y otro con escáner láser para elaborar modelo en tercera dimensión con el que se desarrollará la estrategia de intervención, precisó.
Aclaró que es difícil calcular el tiempo del trabajo porque se debe hacer con cuidado y, por ejemplo, en cada avance del retiro de rocas se debe colocar andamiajes para no exponer al equipo humano y técnico de las tareas: Por ello, el lugar será cerrado al público.
Finalizada esta primera parte se hará el registro fotográfico y de escáner del sitio arqueológico que permitirá, incluso, conocer el estado en que se encuentran las rocas sobre las que se hicieron las pinturas rupestres.
Con estos conocimientos, abundó la experta, se determinarán el método y las técnicas de conservación y restauración que se aplicarán al sitio, de acuerdo con los materiales de que están hechas las pinturas, sus soportes pétreos y mecanismo de alteración.
El INAH recordó que Cuevas Pintas es un pequeño sitio de 13 metros lineales por 2.5 de profundidad que contiene gran cantidad de diseños elaborados en un estilo pictórico identificado como Sierra La Giganta.
Se trata de motivos geométricos de tamaño mediano que no rebasa los 50 centímetros de alto; resaltan representaciones con cuadros, líneas verticales, paralelas, también hay pintura dactilar (hecha con los dedos) y una figura que parece ser caparazón de tortuga, indicó.
Detalló que “hay motivos de un solo color, bicromos y policromos en los que se combina una paleta de blanco, negro, amarillo, ocre y rojo”.
Sandra Cruz acotó que lo interesante de este sitio paleográfico es que es diferente a otros cercanos, como el Gran Mural en la Sierra de San Francisco, y dijo que estudian realizar una reproducción para ubicarla en el Museo de Las Misiones Jesuíticas, en Loreto, para que más gente lo conozca.