- Un cadenero que enarbola paradójicamente una falsaria bandera de pulcritud social, lo amalgama la “impunidad bizarra”
- Bahhh!!!… el cuento de nunca acabar… la “honestidad valiente” del Jefe de la Mafia de la Izquierda en México, está por los suelos
¡Cómo es posible que al señor Andrés Manuel López Obrador se le pida algo que nunca va a cumplir, entregar su declaración patrimonial que desde hace cerca de un mes, no ha re-considerado el tipo de promesas que siempre expresa pero que nunca las hace realidad!
¡Cómo es posible que al gran señor don Manuel Andrés Manuel López Obrador se le moleste por tan semejante agravio para su halo de “honestidad valiente”!
¡Cómo es posible que al Jefe de la Mafia de la Izquierda en México, se le pida peras al olmo cuando don Andrés nunca ha tenido la amabilidad de sortear la complejidad de los hechos con actos de honestidad y transparencia, más sin embargo, a lo largo de toda su carrera política-delictiva se la ha pasado del tingo al tango para burlarse de las Leyes que rigen a México como un país libre y soberano! ¡La pisotea, y la vuelve a pisotear, de la Constitución, mejor ya ni hablamos!
¡Cómo es posible que a un sujeto que se dice ser el Mesías, el Estado mexicano le esté tolerado tanta barbajánada y estupideces que en los anales de la Procuraduría General de la República (PGR), tiene empolvadas en sus archivos de los delincuentes más buscados de México, permanezcan sin la ejecutoría para consignar a tan bestial personaje de la vida política del país!
¡Cómo es posible que desde la época en que gobernó Vicente Fox Quezada, al que luego se dijo ser “Presidente Legítimo”, no se le haya aplicado todo el rigor de la ley cuando tiene acumuladas más de 90 averiguaciones previas y que ninguna… léalo muy bien distinguido lector… ninguna se ha cumplimentado!
¡Cómo es posible que los dirigentes de los tres principales partidos ya realizaron ese compromiso, y el Peje siga en su lucha por el oscurantismo y siniestro de ser un vago cadenero que se la anda pasando molestando a toda la Mafia del Poder!
¡Cómo es posible que a partir del 14 de julio, Andrés Manuel López Obrador se comprometió a hacer públicas sus declaraciones patrimonial, de intereses y fiscal!
¡Cómo es posible que a 25 días de esa promesa, que tuvo como plazo el 29 de julio, el líder de Morena no ha cumplido con su palabra y aún no aparecen en la plataforma #3de3 estos documentos!
Dicen que a pesar de ser el presidente nacional de una de las cuatro principales fuerzas políticas del país (en algunos casos la tercera), el dos veces candidato presidencial le ha sacado la vuelta a este compromiso que ya realizaron los dirigentes nacionales del PRI, Enrique Ochoa Reza; del PAN, Ricardo Anaya Cortés, y del PRD, Alejandra Barrales.
Han pasado los días de que venció el plazo autoimpuesto por el tabasqueño y aún no hay visos de un ejercicio de transparencia en su patrimonio.
Afirman los entendidos que López Obrador tiene más dinero que un pordiosero, que cuando menos éstos personajes urbanos agarran un bote, se ponen en cuclillas, es decir, con las piernas completamente flexionadas, como si se estuviera sentado en el suelo pero apoyándose no en él sino en los talones, para pedir: “Una limosnita por el amor de Dios”.
Pero para el Peje no existe ese mundo, sino el de “avanzada”, el que todos quisieran que le rindieran pleitesía, que lo vieran como el redentor, el salvador, o vaya usted a saber cómo debió haber amanecido nuestro pejecito…, de buenas y de malas, para darle la mala conseja: ya cumple con la #3de3…
“No la he presentado (mi 3de3), pero lo voy a hacer (…) en 10, 15 días, lo más pronto posible, no tengo ningún problema para eso”, sostuvo el 14 de julio en entrevista una entrevista radiofónica, no obstante que los actores políticos que andan a la greña, atacando sobre todo al cadenero López, exigiendo ¡castigo!, para el usurpador por anticipándose en una campaña, que para él, es electoral; para otros, la anticipada carrera para ganarle a sus vecinos de enfrente, que el Peje ya llegó, que el Peje ya está aquí, y que el ambiente ya huele a Peje.
Pese a su popularidad que ha ido de más a menos, el Peje ha ido escalando el gusto de la gente, pero sin un triunfo asegurado, incluso los grupos ortodoxos, la Academia y los Empresarios, han manifestado que “nada con AMLO”
De tal suerte que forzosamente si López Obrador “busca reivindicarse” con su tan trillada “honestidad”, debe reportar con mucha precisión muchos números… por ejemplo, los moches voluntarios de diputados federales, locales y senadores; los recursos que nunca se transparentaron de la Fundación Honestidad Valiente; las subvenciones extraordinarias de grupos parlamentarios como el PT y Movimiento Ciudadano, en el periodo de 2006 a 2014, cuando Morena todavía no recibía su registro como partido político, y sus prerrogativas correspondientes.
Incluso, el Peje debe mostrar a través de su Declaración, el patrimonio que alguna vez dijo que les había dejado a sus hijos, deslizándose que “por ahí pueden salir muchas cosas”.
Aparte, senadores del PRD y PT, integrantes de las dos Legislaturas que comprendieron del 2006 al 2012, aseguraron que después del conflicto poselectoral de 2006, los legisladores de la coalición que impulsó al tabasqueño tenían la obligación de dar una “cooperación voluntaria” para mantener el movimiento de defensa del voto.
Los legisladores revelaron que estos “moches iban de 10 mil a 30 mil pesos de su dieta mensual, aunque aseguran que algunos desistieron de entregar ese recurso a los pocos meses de que López Obrador se declaró “Presidente Legítimo”, el 20 de noviembre de 2006.
Cabe destacar que en la Legislatura 2006-2009, el PRD logró 127 curules en la Cámara de Diputados; 11 el PT, y 18 Convergencia (hoy MC), mientras que en el Senado, el PRD alcanzó 33 escaños, el PT cinco y Convergencia cinco.
Los recursos obtenidos en este lapso permitieron a López Obrador realizar diversas giras por todo el territorio nacional (incluidos boletos de avión para él y sus colaboradores, hospedaje en hoteles, comidas, renta de espacios y equipo para realizar mítines).
Además, celebrar decenas de concentraciones masivas en el Zócalo, Avenida Juárez, el Monumento a la Revolución, el Auditorio Nacional (específicamente la del 10 de octubre de 2011, cuando se da la Asamblea Constitutiva de Morena) o en Reforma; compra de vehículos terrestres para traslados; pago a colaboradores e incluso la renta del inmueble de la Colonia Roma, de 2006 a 2012.
En síntesis, pese a que siempre lo ha cubierto el paraguas de la impunidad, el Peje no la tiene sencilla, porque deberá contar con un despacho de contadores y abogados para que le cuadren sus números y lo defiendan con apremio legítimo y legal; incorporarse a los paliativos de su honestidad valiente, que es un proceso de marco nada despreciativo, sobre doto la danza de los millones siempre le han brincado en sus manos.
Todo tiene su precio y ese precio ha sido tan enorme que su otra famosa frase “cobramos por desgaste físico”, es un hecho intangible.