Kuala Lumpur, 12 ago (PL) Una rara especie de elefante pigmeo, con colmillos creciendo hacia abajo en lugar de hacia arriba, fue encontrada en este país, según informaron hoy fuetes locales.
De acuerdo con el director adjunto del Departamento de Vida Silvestre de Sabah, Sen Nathan, el aspecto de esa subespecie de elefante asiático es semejante, por la mencionada peculiaridad de sus colmillos, a un tigre con dientes de sable.
El inusual animal fue hallado por un equipo de expertos en vida silvestre en una plantación palma aceitera en el estado malasio de Sabah, en la isla de Borneo.
No estamos exactamente seguros de por qué los colmillos son así, pero podría ser un defecto congénito o quizá debido a la endogamia, consideró Nathan.
Un elefante similar fue captado por la cámara hace unos años y otro en 2015, también en Sabah, agregó.
El departamento de vida silvestre planea enviar al animal a un santuario de elefantes hasta que sea encontrada una zona adecuada para liberarle con un dispositivo de seguimiento adjunto.
Los colmillos se asemejan a los del prehistórico tigre de dientes de sable, pero por supuesto, no están relacionados, afirmó Andrew Sebastián, co-fundador de la Sociedad de Ecoturismo y Conservación de Malasia.
Sebastián advirtió, además, que los colmillos invertidos podrían crear algunos problemas, aún por estudiar, cuando conviva con otras especies semejantes.
Una investigación mostró que hace una década había unos dos mil elefantes de Borneo o elefante pigmeo en Sabah.
Funcionarios de medio ambiente dijeron que un nuevo estudio se llevará a cabo pronto para evaluar las condiciones de vida de esos elefantes, los más pequeños de los que habitan en Asia, debido a un aumento de reportes sobre posible riesgo de extinción.
La mayor amenaza para los elefantes en Sabah no es la caza furtiva, sino la pérdida de hábitat debido a la modernización y el aumento de la población humana.
Durante los últimos años, el cultivo de la planta aceitera se expandió de forma acelerada en países del Sur asiático.
Malasia genera el 50 por ciento de la producción mundial y el Gobierno piensa que este cultivo dará lugar a mayor empleo y superior nivel de vida, promoviendo exportaciones generadoras de divisas, al mismo tiempo que las plantaciones de palma son más eficientes como sumideros de carbono que los pinos de los países desarrollados.
Desafortunadamente, el terreno preferido por el elefante pigmeo es también el idóneo para esos sembradíos comerciales, de ahí que durante las últimas cuatro décadas el 40 por ciento de los bosques en Sabah fueron arrasados por la tala de árboles, la conversión en plantaciones y los asentamientos de personas.