La violencia en México no ha disminuido de un sexenio a otro.
Aunque la tasa de homicidios a nivel nacional bajó entre 2012 y 2015 en lugares como Guerrero y Chihuahua, la cifra de asesinatos se mantuvo en dos mil cada año, según estadísticas del INEGI.
Estados como Colima y Baja California Sur, lugares que en 2012 no figuraban en los primeros diez en este delito, ahora tienen una tasa de homicidios que duplica la nacional.
Las cifras no muestran un panorama alentador, ya que en los primeros seis meses del 2016 el registro de homicidios subió 20 por ciento respecto al mismo periodo de 2015.