La secretaria de la Comisión del Agua en la Asamblea Legislativa y diputada local del PRD, Janet Hernández Sotelo, calificó como dramática la actual situación de la escasez y falta de agua en el Oriente de la ciudad y en particular en Iztapalapa por lo que insistió en que sólo inyectando recursos a la red hidráulica y red de drenaje, se podría mitigar la situación difícil del vital líquido.
La asambleísta externó que para evitar un colapso en la cosmopolita Ciudad de México ante una escasez de agua generalizada, el gobierno federal debe invertir alrededor de 8 mil millones de pesos a fin de paliar la situación en que viven miles de familias por la falta de agua.
Los recortes presupuestales propuestos por la Secretaría de Hacienda federal solo ahondarán la difícil situación en que viven miles de capitalinos por no contar con el vital líquido en sus hogares, alertó la legisladora perredista.
“Por ello, al interior de la ALDF estaré exhortando a las bancadas para que sea generosa con estos dos temas de vital importancia para los habitantes capitalinos”, dijo y subrayó que invitará al director de Sacmex, Ramón Aguirre “para reforzar la petición de frenar el desatinado recorte que quiere imponer Hacienda y el Ejecutivo federal”.
Recordó que el titular de SACMEX, ya ha puesto en claro que el ajuste del 70 por ciento que impuso SHCP en su presupuesto de 2017 obligará a cancelar nuevas obras que ayudan a mitigar el problema en la Ciudad, el directivo ya ha dicho que no hay recursos para el mantenimiento de la red hidráulica lo que afectará irremediablemente a la ciudadanía.
Janet Hernández abundó que son miles de millones de pesos los que necesita la capital del país para poder contar con el mínimo requerido de agua por habitante, por ello hizo un llamado a los 500 diputados federales para que reconsidere lo propuesto por Hacienda federal y entregue los recursos que tanta falta hace a los capitalinos.
El recorte propuesto por la autoridad hacendaria afectaría programas como el Fondo de Capitalidad, Proyectos de Desarrollo Regional, Fondo para el Fortalecimiento de la Infraestructura Estatal y Municipal, Universidad Autónoma de a CDMX, Subsidio y administración del agua y agua potable y subsidios agrícolas, entre otros más, recalcó la legisladora del PRD.
Dijo que los diputados deben analizar bien la situación del presupuesto 2017 ya que el no contar la capital con el Fondo de Capitalidad que son más de 4 mil mdp afectará irremediablemente a que se agudice la problemática del agua y otros servicios vitales para que camine la Ciudad.
El director general de Sacmex, Ramón Aguirre, quien comparecerá una vez más ante la Asamblea Legislativa este lunes, ha comentado que el tema del agua se complica cada vez más y el mayor problema está en la Ciudad de México, pues se agotan las fuentes de abastecimientos.
En su momento el funcionario dijo ante el Legislativo que mientras a Conagua está propuesto un recorte federal del 40 por ciento, a la capital de país le quieren aplicar un recorte del 70 por ciento en este rubro. Aguirre ha hecho público que en 50 años más, de no invertir recursos, se secará la ciudad.
Durante un foro sobre la importancia de las aguas subterráneas en la Cuenca de México, realizado en la Procuraduría Ambiental, el funcionario dijo que se requiere de un plan a un plazo de al menos 25 años, con metas definidas y presupuesto garantizado para reducir al menos a la mitad el gasto de agua en la megalópolis.
«Tenemos 100 por ciento de posibilidades de que nos lleve el carajo si no hacemos algo. Nos quedan 50 años de agua con el consumo actual, en comparación Bogotá (capital de Colombia) tiene abasto garantizado para 240 años”, definió Ramón Aguirre.
Asimismo, la jefa delegacional en Iztapalapa, Dione Anguiano Flores, para 2017 solicitará una ampliación del presupuesto de esta demarcación para hacer frente a la escasez de agua debido a que el problema de falta de agua es severo en diversas colonias de la demarcación.
De tal modo, la psicosis que embarga a la megalópolis, se ha dramatizado a un estado mental descrito como una escisión o pérdida de contacto con la realidad, por lo que sociedad y gobierno, o gobierno y sociedad, urge que ambos a través de sus instituciones, le den una inmediata solución a tan problemática que viven más de 25 millones de capitalinos y su periferia.
El grado de enfermedad social ha sido tan mayúsculo que la psicosis se ha engendrado en la psicopatía, a decir, un trastorno de la personalidad sin relación alguna a la psicosis.
Las personas que experimentan psicosis pueden presentar alucinaciones o delirios y pueden exhibir cambios en su personalidad y pensamiento desorganizado. Estos síntomas pueden ser acompañados por un comportamiento inusual o extraño, así como por dificultad para interactuar socialmente e incapacidad para llevar a cabo actividades de la vida diaria.
Una amplia variedad de elementos del sistema nervioso, tanto orgánicos como funcionales, pueden causar una reacción psicótica. Esto ha llevado a la creencia que la psicosis es como la fiebre de las enfermedades mentales, un indicador serio pero no específico. Sin embargo, muchas personas tienen experiencias inusuales y de distorsión de la realidad en algún momento de sus vidas, sin volverse discapacitadas o ni siquiera angustiadas por estas experiencias.
Como resultado, cierta corriente de investigadores argumentan que la psicosis no está fundamentalmente separada de una conciencia normal, sino más bien es un continuum con conciencia normal. Desde esta perspectiva, las personas que son diagnosticadas clínicamente como psicóticas pueden estar teniendo simplemente experiencias particularmente intensas o angustiantes. Ese es el tamaño que viene sufriendo la sociedad, a un extremo de sufrir hasta paros cardiacos poniendo fin a sus vidas.